Las instituciones de educación superior no serían las únicas que podrían sufrir recortes el próximo año, pues la tijera de la austeridad del gobierno de Andrés Manuel López Obrador también tocaría 29 programas de la Secretaría de Educación Pública (SEP), a la cual en total se le pretende destinar 300,140 millones de pesos para 2019.

De los 35 programas presupuestarios federales en materia educativa que actualmente contempla la propuesta del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2019, en solo seis se contemplan incrementos, mientras que en el resto se proponen recortes de hasta 65%.

La administración de López Obrador también planteó la creación de cuatro nuevos programas, que en conjunto podrían recibir 8% del total de la bolsa destinada a los proyectos educativos, mismos que forman parte de sus promesas de campaña.

Según el PEF 2019, los programas federales a los que se prevé destinar más flujo de dinero -en comparación con el año pasado- son los de Servicios de Educación Superior y Posgrado, con un incremento del 453%; el programa para el Fortalecimiento de la Educación Temprana y el Desarrollo Infantil con 66% más, y el Programa de Inclusión Social PROSPERA, con un incremento del 41.4%.

Los programas más afectados con cifras a la baja son los apoyos que recibirían centros y organizaciones de educación (80% de los ingresos mermados) y los subsidios para la expansión de la Educación Media Superior y Superior, con un recorte del 60.3%.

Pese al anuncio de la cancelación de la Reforma Educativa, cuatro programas que se lanzaron con ésta aún se contemplan en el proyecto del Presupuesto, aunque con dinero público menguado.

Otros tres programas federales podrían ser eliminados al no estar contemplados como parte de la bolsa del PEF 2019.

Estos son el de Inclusión Digital -mediante el cual se regalaron tabletas a alumnos de quinto de primaria desde 2016-, el Programa de Formación de Recursos Humanos basada en Competencias con el que se fomentaron carreras técnicas y los apoyos para la atención a problemas estructurales de las Universidades Públicas Estatales.

En el presupuesto 2018 los tres obtuvieron en conjunto 807 millones de pesos.

El polémico tema de las universidades

Los recortes que podrían sufrir la Universidad Nacional Autónoma de México, la Autónoma Metropolitana, la Pedagógica Nacional, el Colegio de México, el Instituto Politécnico Nacional y su Centro de Investigación y de Estudios Avanzados representan una disminución en pago destinado a sueldos, adquisición de materiales y suministros.

Aunque este martes, desde Hidalgo, el presidente López Obrador explicó que fue “un error” la baja al presupuesto universitario, el cual será reparado y entregará lo que les corresponde.

Quiero dar a conocer que se cometió un error en la presentación del presupuesto, porque yo hice un compromiso público de que no se iba a reducir el presupuesto de las universidades. Aquí sostengo que se va a reparar ese error

De la sumatoria del total de gasto corriente del PEF 2019 para estas instituciones educativas, se desprende que de Servicios Personales, el monto propuesto representa un ahorro del 1% en comparación con 2018, al pasar de 51,646 a 51,180 millones de pesos.

Por otra parte, en el rubro de Gasto Corriente se observa un ahorro equivalente al 12%, al pasar de 10,373 a 9,189 millones de pesos del 2018 al 2019.

Ambos rubros forman parte del Gasto Corriente -dinero que se etiqueta para el pago de sueldos, adquisición de materiales y suministros para el funcionamiento de las dependencias- y del que el secretario de Hacienda y Crédito Público, Carlos Urzúa, ha insistido en que se desprenden “sueldos desproporcionalmente altos”.

Desde el 16 de diciembre, el anuncio en la disminución de los recursos de las casas de estudios provocó la reacción de rectores, así como de directivos de diferentes Universidades Públicas Estatales (UPES), quienes manifestaron su rechazo a los números a la baja dados a conocer el 15 de diciembre en el proyecto del PEF 2019.

Éste es el primer recorte que sufren la UNAM, la UAM y el IPN desde 2012.

La UNAM fue la primera en pronunciar su desacuerdo, mediante un desplegado publicado el lunes 17 de diciembre en el que exhortó a la Cámara de Diputados a modificar el PEF 2019 y evitar así el recorte.

Se argumentó que el recorte “no corresponde a la trascendente e importante labor de la institución de enseñanza superior más grande de Amércia Latina”, además recriminó que la cifra no era consecuente con el compromiso que se hizo con los rectores y la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior, (ANUIES), al cual López Obrador hizo referencia ayer y dijo que lo cumpliría con la enmienda de los recursos.

La UAM también publicó un desplegado en sus redes sociales, en el que pidió “rectificar” la bolsa destinada a esta institución, además lanzó el hashtag #NoReducción.

A la petición se unieron 15 universidades públicas estatales, las cuales en un desplegado en prensa de circulación nacional aseguraron que la disminución “compromete el logro de las funciones sustantivas”.

Tras estas primeras muestras de rechazo y ante los cuestionamientos de la prensa, el presidente López Obrador justificó que la “reasignación” representa una disminución en el pago de sueldos de los altos servidores públicos y en gastos de operación.

El jefe del Ejecutivo también aseguró que hablará con los rectores para “informarles” y “escucharlos”, pero que al final es una decisión en manos de la Cámara de Diputados, aunque el tema podría cambiar luego de sus declaraciones de que todo se trató de un “error”.

En redes sociales ya circula una imagen en la que se convoca a manifestarse en contra de los recortes que se plantean. La cita es este jueves 20 de diciembre en el Zócalo capitalino.

También inició una campaña de estudiantes que piden a la Auditoría Superior de la Federación que se realice una revisión exhaustiva al interior de las universidades, para tratar de detectar las irregularidades y corrupción en el manejo de recursos de las autoridades universitarias.