El juez mexicano Francisco Rebolledo concedió un recurso legal a Bayer contra la ley impulsada por el gobierno que busca prohibir el herbicida a base de glifosato, lo que le otorga un respiro temporal frente a la prohibición gradual del herbicida ampliamente utilizado, compartió la empresa.
La farmacéutica alemana adquirió en 2018 a Monsanto, empresa dedicada a la venta de soluciones para la agroindustria como semillas y pesticidas, que es una de las principales fabricantes de gilfosato a nivel global, que comercializa bajo la marca Roundup.
El asunto legal aún tiene que ser ratificado de manera definitiva, de acuerdo a la firma. La oficina del juzgado no estuvo disponible para dar mayores detalles.
Organismos reguladores en todo el mundo han determinado que el glifosato es seguro, pero existen especialistas que opinan lo contrario. Bayer llegó a un acuerdo en junio de 2020 con cerca de 100,000 demandantes en Estados Unidos para pagar 9,600 millones de dólares, al tiempo que negó los reclamos de que Roundup causara cáncer.
Además, en febrero alcanzó otro acuerdo por 2,000 millones de dólares para resolver una demanda colectiva de futuros reclamos relacionados con las acusaciones de que Roundup provoca cáncer.
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, emitió un decreto a finales del año pasado que pretende prohibir completamente el herbicida para 2024, uniéndose a otros gobiernos que han intentado restringir su uso, entre ellos Alemania. El mandatario ha calificado el producto químico como tóxico.
El químico es utilizado para maximizar la productividad de los cultivos al matar la maleza que crece a su alrededor. La agroindustria nacional ha levantado la voz contra la prohibición del producto y argumenta que pone en riesgo la producción de alimentos y que elevaría su precio.
La tóxica relación entre el glifosato y el gobierno mexicano
De acuerdo a la Unión Mexicana de Fabricantes y Formuladores Agroquímicos (UMFFAAC) y la organización Protección de Cultivos, Ciencias y Tecnología (Proccyt) los herbicidas a base glifosato son utilizados en el 65% de las áreas cultivadas en México, lo que equivale a 16.1 millones de hectáreas repartidas entre 117cultivos diferentes.
La decisión del juez Rebolledo se basó en el riesgo de que la prohibición perjudique a la producción agrícola y la seguridad alimentaria en el país, de acuerdo a una nota publicada por Reforma.
Si el fallo es definitivo, el recurso legal podría eximir del decreto a los permisos de glifosato de Bayer, que fueron presentados como Monsanto.
Con información de Reuters