En la estrategia para aumentar sueldos y salarios de los profesores, el gobierno federal contempla invertir 25,000 millones de pesos, cifra 26.7 veces mayor a los 935.2 millones de pesos al presupuesto que se asignó para inversión física de la Secretaría de Educación Pública (SEP).

La cifra en inversión no contempla las aportaciones federales para entidades federativas y municipios (Ramo 33) en el que, según datos de Hacienda, el gasto total de la SEP es de 448,736 millones de pesos y de ese monto, 94.6% se concentra en el Fondo de Aportaciones para la Nómina Educativa y Gasto Operativo (FONE).

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Ante la presentación del plan surgió la duda sobre de dónde saldrán los 25,000 millones de pesos, además que el sector educativo requiere de una estrategia integral en el que docentes y estudiantes se vean beneficiados, coincidieron especialistas en finanzas públicas y educación.

Las condiciones laborales, la formación de los docentes y la infraestructura están asociadas con el aprendizaje de los estudiantes. Creo que se necesita una estrategia integral que contemple a profesores como infraestructura y esto requiere mayores recursos

dijo en entrevista Alejandra Llanos, coordinadora del área de educación y finanzas públicas del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).

En tanto, Marco Fernández, coordinador del programa Educación de México Evalúa e investigador de la Escuela de Gobierno del Tecnológico de Monterrey, consideró que los recursos que destinará Hacienda no son suficientes, además que no hay un plan para un aumento salarial generalizado para el magisterio.

Esos profesores (beneficiados que en total son 1.18 millones) son una minoría; la mayoría tiene un aumento que es inferior a la inflación y no es sorpresa que los maestros no estén contentos

indicó Fernández.

Efecto multiplicador de la inversión

La importancia del gasto en inversión pública radica en su efecto multiplicador, ya que los beneficios no son solamente para el sector educativo manifestados en obras, infraestructura, servicios o cualquier proyecto productivo, sino también se traslada en la generación de empleos y derrama económica en otras actividades.

De acuerdo el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2022, del gasto programable de la SEP (364,600 millones de pesos), el 99.7% corresponde a gasto corriente y 0.3%, a gasto en inversión.

Al interior del gasto corriente se encuentra el capítulo de servicios personales, al cual se le presupuestaron 122,823 millones de pesos, alrededor de una tercera parte del total.

En este capítulo se concentran los salarios y sueldos de la SEP, además de prestaciones, pago de estímulos, previsiones y seguridad social.

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Construcción de escuelas con 373.1 mdp

En el capítulo de gasto se inversión, con 935.2 millones de pesos de presupuesto para este año, se agrupan la adquisición de bienes muebles e inmuebles, obras públicas y otros proyectos productivos.

De esta partida, la analista del CIEP subraya que del total de inversión física solo 373.1 millones de pesos es para obras públicas, es decir la construcción de escuelas y salones.

El gasto en infraestructura educativa que se traduce en la construcción de salones y escuelas (que es) inversión asociada positivamente y significativamente con los aprendizajes de los y las estudiantes son 373.1 millones de pesos

señaló Llanos.

Falta de estrategia educativa

Además del alza salarial, para Alejandra Llanos queda un reto pendiente en el sector y es una estrategia ante el rezago educativo resultado del confinamiento en el que los alumnos se vieron obligados a tomar clases a distancia.

No se tiene una estrategia para atender estar pérdida de aprendizaje, no hay una estrategia a nivel nacional, la SEP no ha llevado a cabo un diagnóstico para conocer realmente cuál es la magnitud de este problema

sostuvo Llanos.

Aunque la SEP realizó una encuesta para hallar las problemáticas tras el aislamiento no cuenta con un diagnóstico de cuántos años de escolaridad se perdieron por la pandemia.

80% de los padres y madres perciben rezago educativo

Fernández explica que el 80% de los padres de familia ven un rezago y a pesar de que mejoró la parte anímica de los estudiantes;  también, el 53% de los padres y madres de familia ven una afectación emocional, de acuerdo con una encuesta realizada por Iniciativa de Educación con Equidad y Calidad del Tecnológico de Monterrey y Reforma.

Esto pone el reto de que si no capacitas a los docentes para poder contener emocionalmente a los alumnos, pues inevitablemente tiene un impacto negativo en el aprendizaje de los estudiantes

dijo el profesor del Tecnológico de Monterrey.

La estrategia del gobierno federal para el sector educativo, pretende mejorar las condiciones de los maestros del país en medio de un periodo de alta inflación; sin embargo, se desvanece el efecto multiplicador en los sectores económicos, beneficiando con un bajo impacto en el consumo privado.

Miguel Moscosa y Rodrigo A. Rosales