El presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que se pagarán las pensiones y jubilaciones pendientes de los trabajadores de la extinta Luz y Fuerza del Centro (LyFC). 

Durante la conferencia matutina, Ernesto Prieto, director general del Instituto para Devolverle al Pueblo lo Robado (INDEP) informó que pagarán la pensión de 8,892 trabajadores que fueron despedidos de la compañía en 2009.

La medida responde a una legítima demanda social para garantizar una compensación a todos aquellos extrabajadores que al 11 de octubre del 2009 tenían por lo menos 19 años, seis meses y un día de tiempo servicio

aseguró Prieto desde Palacio Nacional.

El funcionario explicó que para este año cuentan con un presupuesto de 1,458.6 millones de pesos, los cuales serán aportados por dicho instituto.

Número de pensiones 

De acuerdo con un informe del INDEP, al momento de la extinción de la compañía el 11 de octubre de 2009, había 9,249 trabajadores con 19 años de servicio, de los cuales 352 ya fallecieron y cinco ya se encuentran jubilados, por lo que se tiene a 8,892 trabajadores con una antigüedad laboral de más de 19 años, quienes ahora recibirán su jubilación. 

El ingreso promedio mensual de pensión de 4,270 exempleados será de 3,200 a 10,000 pesos, de acuerdo con el desglose presentado por el Indep. 

Mientras que para 3,673 exempleados recibirán una jubilación entre 10,000 y 20,000 pesos mensuales.

Solamente 25 personas serán acreedoras a una pensión con un máximo de 67,000 pesos.

De acuerdo con el estudio “Pensiones en México: 100 años de desigualdad”, realizado por el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP) en 2016, el presupuesto que se tuvo para las pensiones de los trabajadores de Luz y Fuerza del Centro fue 19,482 millones de pesos para cubrir a 20,067 empleados.

El gasto anual promedio por pensionado fue de 970,844.0 pesos en ese año, de acuerdo con el CIEP.

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Luz y Fuerza del Centro, una empresa insostenible

En 1914, se creó el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), el cual servía a la industria privada y fue hasta 1994 cuando se creó el organismo descentralizado Luz y Fuerza del Centro (LyFC) debido a la facultad de terminar de liquidar las empresas concesionarias.

De acuerdo con el estudio del CIEP, en 2009, el gobierno del presidente Felipe Calderón decretó la extinción del organismo, debido a que los costos casi duplicaban los ingresos por ventas.

Las pérdidas de energía y su pasivo laboral, (más del 60% correspondía a personal jubilado) ocasionaron que la empresa fuera insostenible.

Con su extinción, los contratos colectivos de trabajo, que incluían una pensión de beneficio definido, fueron respetados, acorde con la Ley Federal del Trabajo. En cambio, los pasivos laborales pendientes, de quienes no fueron integrados a la ya existente CFE, los absorbió el gobierno federal, con cargo a lo establecido en cada Presupuesto de Egresos de la Federación.

En 2015, el Servicio de Administración y Enajenación de Bienes reportó que el pasivo laboral de Luz y Fuerza del Centro fue de 347,392.1 millones de pesos.

Dado que la compañía aún se encuentra en proceso de extinción y cuenta con litigios laborales vigentes, la Auditoría Superior de la Federación en 2012 estimó que las obligaciones laborales terminarán hasta el 2074.

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