Lo único que se requirió fueron tres tweets a cargo de Binance para que FTX, hasta ayer el tercer exchange más importante del mercado, se encuentre al borde de la quiebra y en la mira de las autoridades norteamericanas e inversionistas, pero también para evidenciar una vez más que no exageramos cuando decimos que el mundo cripto está fundamentado en varios mitos geniales, uno de ellos es que la industria posee una ética a toda prueba sobre todo por ser una economía descentralizada que no está sujeta a las presiones de gobiernos.
Seamos honestos, las criptomonedas son manejadas por un mínimo de personas y el valor de los activos virtuales puede ser manipulado por los dueños de los exchanges y los influencers y para muestra de ello ahí está la reciente multa impuesta por la Comisión de Valores y Bolsa de Estados Unidos de 1.3 millones de dólares a Kim Kardashian, quien en 2021 promocionó de manera encubierta en su cuenta de Instagram (en ese entonces con 225 millones de seguidores, actualmente son alrededor de 333 millones) una criptomoneda sin reportar que por esa publicación había cobrado 25,000 dólares.
Además de esa multa, la empresaria generosamente se comprometió a no hacer publicidad de criptomonedas por un período de tres años.
¿Por qué desistió Binance?
Regresando al affaire Binance-FTX hay que decir que los dichosos tweets no fueron cualquiera, ya que Binance no solo señaló que habían decidido no avanzar en la compra de FTX, sino que hizo público el argumento.
Este no fue necesariamente el precio de compra, sino que fue a consecuencia de los resultados de las investigaciones de debida diligencia (aplicables a cualquier transacción de este tipo), de las noticias (negativas, obvio) relacionadas con una inadecuada gestión de los fondos de los clientes, así como a que supuestamente hay investigaciones a cargo de autoridades de los Estados Unidos.
As a result of corporate due diligence, as well as the latest news reports regarding mishandled customer funds and alleged US agency investigations, we have decided that we will not pursue the potential acquisition of https://t.co/FQ3MIG381f.
— Binance (@binance) November 9, 2022
Dicho en otras palabras, las áreas Legal y de Compliance de BINANCE no dieron la autorización abriendo con ello la posibilidad de que FTX quiebre ya que varios medios especializados han reportado que el fundador de FTX, Sam Bankman-Fried, habría dicho que si la plataforma no recibía una Inyección de capital se iría a la quiebra. Algunas cifras que encontré dicen que FTX necesita (necesitaba, más bien) una cifra cercana a los 4,000 millones de dólares, no de criptomonedas.
Ecosistema resistente
Binance fue más allá en su postura pública al decir que si bien su esperanza era el poder apoyar a los clientes de FTX (no necesariamente a FTX) asegurándoles liquidez, los problemas estaban fuera de su control o de su capacidad para ayudar. La estocada final para FTX está en el tercer tweet:
En los últimos años hemos visto que el ecosistema de las criptomonedas se está volviendo más resistente y creemos que, con el tiempo, el mercado libre eliminará a las empresas atípicas que hacen un mal uso de los fondos de los usuarios
Es decir, la plataforma de intercambio de criptomonedas con el mayor volumen comercial del mundo se constituyó como un whistleblower y lanzó una advertencia al mercado y a los reguladores sobre una empresa que al parecer estaba manejando de manera indebida los fondos de sus clientes.
¿Qué pasará ahora?
¿Qué pudo haber detectado en lo concreto el equipo Legal y de Compliance de Binance?
Hay rumores de que parte de los findings es que al parecer FTX le prestó 8,000 millones de dólares en activos de sus clientes para financiar apuestas de alto riesgo de su empresa comercial afiliada, Alameda Research.
Habrá que ver que surge de las investigaciones del Departamento de Justicia a la operación de FTX y a su token nativo, FTT/USDT, así como de las posibles demandas a cargo de celebridades que tenían dinero, si, dinero de la prehistoria invertido en FTX o que recibían parte de su salario en criptomonedas como el beisbolista Shohei Ohtani, el basquetbolista Stephen Curry, el jugador de football americano Tom Brady (quien es, o era el embajador de la marca FTX ) y la modelo Gisele Bündchen.
La caída de FTX es de lo más relevante porque muchos especialistas y criptoinfluencers la colocan al mismo nivel que FYRE, ENRON, Long-Term Capital Management, Archegos Capital Management e incluso de Lehman Brothers y a su dueño, Sam Bankman-Fried, al nivel de Bernie Madoff.
El criptoinvierno sigue aquí pero, para algunos, el clima está tan caliente como el infierno cuando el valor de su token cae de los 26 a los 18 dólares y no hay, ni habrá en el horizonte un bailout a cargo del gobierno norteamericano porque hay una sombra de un esquema Ponzi sobre sus cabezas.
Este escándalo es tan relevante que Changpeng Zhao, el CEO de BINANCE, tuiteó que había tenido comunicación con el presidente de El Salvador, Nayib Bukele:
Man, the amount of misinformation is insane.
I exchanged messages with President Nayib a few moments ago. He said “we don’t have any Bitcoin in FTX and we never had any business with them. Thank God!” https://t.co/CrM5wd24Ha
— CZ 🔶 Binance (@cz_binance) November 10, 2022
Desconocemos las razones por las que BINANCE decidió hacer públicas sus razones para no seguir con la compra de FTX, bastaba con un discreto y privado “gracias, pero no gracias”. Optaron por incendiar el bosque y tres tweets bastaron para destruir la reputación de su rival pero, en lo personal, estoy agradecido con Changpeng Zhao ya que nos confirma que la imagen de incorruptibilidad y superioridad del mundo cripto no es sino un gran storytelling.
