Pese a tener una valuación de 47,000 millones de dólares, We Work podría no emocionar mucho a los inversionistas con su oferta pública inicial cuando se enteren que perdió 219,000 dólares cada hora durante los 12 meses previos a marzo de este año, según datos revelados por el Financial Times.
Todo parecía ir bien. El año pasado, las pérdidas y los ingresos de We Work se duplicaron a 1,900 millones de dólares y 1,800 millones de dólares, respectivamente. En marzo de 2019, la compañía afirmó que estaba en camino para alcanzar los 3,000 millones en ingresos en el año, pero perdió 700 millones de dólares en el primer trimestre.
Para la vieja guardia de bienes raíces comerciales, WeWork, la unidad principal de The We Company recientemente rebautizada, es un disruptor que encabeza el movimiento hacia la reducción del espacio de trabajo con un modelo de negocio sin obstáculos por la propiedad. Para los escépticos, la compañía es otro unicornio no rentable cuestionable.
Su principal inversionista, el CEO de Softbank, Masayoshi Son, ha invertido más de 10,000 millones de dólares en We Work, pero en diciembre invirtió solo 6,000 millones de dólares después de prometer una suma de 16,000 millones de dólares.
A consideración de Business Insider, la incertidumbre en We Work se centra en tres aspectos: el primero es la estabilidad de su modelo, especialmente lo que sucederá con sus clientes con contratos de corto plazo en caso de que ocurra una recesión.
El segundo es el dilema sobre si es una empresa de bienes raíces o tecnológica y con que otras compañías debe compararse.
Y, finalmente, su CEO, Adam Neumann, a quien New York Magazine describió como loco e idealista, mientras otros lo miran por recelo por su ambiciosa visión.
Sin embargo, dice BI, esa ambición y la técnica de ventas del director ejecutivo es la fuerza que ha disparado a We Work a una valuación de casi 50,000 millones de dólares en menos de una década.
Según información en el sitio web de la empresa, tiene 743 espacios de coworking abiertos o en proceso en 124 ciudades en 36 países.