El fabricante alemán de automóviles Volkswagen informó el viernes de una utilidad operativa de 13,000 millones de dólares en el primer semestre de 2021, beneficiándose de una “sólida” recuperación a pesar de la escasez de componentes que podría afectar la segunda mitad del año.
“Las entregas (…) siguieron recuperándose de manera sólida en el primer semestre”, dijo el grupo en un comunicado de resultados preliminares publicado el viernes.
La empresa también afirma haber tenido ventas “muy elevadas” entre enero y junio, aunque no aportó más detalles al respecto.
En el mismo periodo de 2020, Volkswagen había registrado una pérdida operativa de 1,700 millones de dólares debido a la crisis sanitaria mundial.
El fabricante supera su nivel del primer semestre de 2019, antes de la pandemia de coronavirus, cuando obtuvo un beneficio operativo de 10,600 millones de dólares.
Sin embargo, el grupo alemán advierte que “la escasez de semiconductores (…) es más probable que provoque pérdidas de valor en la segunda mitad del año”.
A principios de año, el grupo se benefició de la reapertura de la economía mundial, gracias a la tregua de la pandemia de coronavirus, sobre todo en Estados Unidos y China, y luego en Europa.
Pero desde hace varias semanas, la compañía se enfrenta, como todo el sector, a la escasez de componentes electrónicos, sobre todo de chips, lo que le impide cumplir con muchos pedidos.