La petrolera francesa Total registró pérdidas de 7,242 millones de dólares (5,982 millones de euros) en 2020, como consecuencia del impacto de los bajos precios del petróleo a nivel mundial.

Si solo se considera el cuarto trimestre del 2020, la petrolera reportó pérdidas por 891 millones de dólares, una caída del 66%, respecto al mismo periodo del 2019.

De acuerdo con su reporte trimestral,  Total enfrentó dos crisis importantes en 2020: la pandemia de COVID-19, que afectó gravemente a la demanda mundial de energía, y la crisis del petróleo, que llevó el precio del Brent por debajo de 20 dólares por barril en el segundo trimestre.

Con este panorama, los ingresos de la petrolera se vieron afectados con una caída de 29.8%, respecto del 2019, con lo que solo generaron ingresos por 140,685 millones de dólares (116.220 millones de euros) al cierre del 2020.

Los resultados de la petrolera francesa quedaron en línea con los de las otras grandes petroleras en 2021: ExxonMobil sufrió su primera pérdida anual desde 1999 y BP la primera en una década.

Cuarto trimestre da ligero respiro

Entre octubre y diciembre, Total logró un beneficio neto atribuido de 891 millones de dólares (736 millones de euros), esto a pesar de suponer una caída del 65.7% respecto del resultado del cuarto trimestre de 2019, lo que representó su segundo trimestre consecutivo con un resultado positivo, tras las pérdidas multimillonarias del segundo trimestre de 2020.

Los resultados del cuarto trimestre rebotaron desde trimestres anteriores en un contexto de estabilización de los precios del barril de petróleo por encima de 40 dólares, gracias a la disciplina de la OPEP+

indicó Pouyanné. 

En exploración y producción, la petrolera registró una caída de 56%, respecto del 2019; sus ingresos netos fueron por 4,404 millones de dólares; muy por debajo de los 14,554 millones de dólares que registró el año anterior. 

Si solo se considera el cuarto trimestre, la caída en los ingresos netos fue de 53%, reportando 1,824 millones de dólares.