Heliogen, una empresa de energía limpia que es apoyada por el fundador de Microsoft y que suele mantenerse fuera de los reflectores, anunció esta semana que ha conseguido una meta que muchos creían imposible: utilizar la luz solar para generar más de 1,000 grados centígrados. El descubrimiento podría ser aplicable a industrias que previamente se creían dependientes del gas natural, reduciendo así las emisiones contaminantes.

Estamos desplegando tecnología que puede mejorar los precios de los combustibles fósiles y evitar la emisiones de CO2 [producto de otras tecnologías], y ese es realmente el Santo Grial de este sector

Bill Gross, fundador y CEO, Heliogen

El equipo de Heliogen creó un “horno solar” mediante el uso de inteligencia artificial que maneja el movimiento individual de un campo de espejos. Esta combinación es capaz de reflejar suficiente luz solar a un punto concéntrico para alcanzar los 1,000 grados, temperatura necesaria en las industrias de cemento, acero y cristal, entre otras.

Previo al anuncio de Heliogen, expertos en el sector consideraban difícil reducir emisiones en dichas industrias, que representan entre 20 y 25% de las emisiones mundiales de carbono, de acuerdo con la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos.

Bill Gates describió el éxito como “un paso importante en la misión para reemplazar por completo los combustibles fósiles”.

La compañía explicó también que está trabajando en un sistema de almacenamiento de energía para que su tecnología pueda ser utilizada incluso en días nublados y dijo que está enfrascada en una carrera por demostrar que sus métodos pueden ser utilizados en industrias altamente demandantes a gran escala.

Incluso si eliminamos el uso de combustibles solo durante el día podemos tener un impacto enorme en la reducción de CO2. Algunas de estas compañías están buscando formas de reducir sus emisiones en 1, 2 o 3%. Si nosotros somos capaces de colocar nuestros equipos en el terreno de al lado y correrlos durante ocho horas del día ya estamos reduciendo sus emisiones y consumos en un 33%

Bill Gross, fundador y CEO, Heliogen

El arma secreta de Heliogen para convencer a las empresas de la viabilidad de su tecnología son los bajos costos de insumos: una vez que el campo solar es adquirido, se eliminan los gastos en carbón o gas natural que actualmente existen en la industria.

Heliogen ofrecerá a sus clientes potenciales la opción de contratar a la compañía y pagar sólo por la energía utilizada (a un precio menor que las alternativas fósiles), o comprar el equipo y operarlo de forma independiente, con una inversión que calculan será amortizada en tres años.

El proceso utilizado por Heliogen funcionó al primer intento y tiene otros efectos positivos: de acuerdo con la propia compañía, la temperatura alcanzada podría utilizarse para producir hidrógeno limpio a gran escala, el cual podría ser utilizado para impulsar camiones de carga o incluso aviones.

Gross consideró que la producción de hidrógeno verde sería un cambio de paradigma en la industria y reveló que ese es el fin último de su empresa.