Banco Santander obtuvo en el tercer trimestre una ganancia de 1,750 millones de euros (2,070 millones de dólares), tras haber perdido 11,129 millones de euros en el periodo inmediato anterior, debido al impacto de la pandemia de COVID-19.

El resultado del banco español superó las estimaciones de los analistas consultados por la empresa de información financiera Factset, que preveían una ganancia de 1,000 millones de euros.

“La actividad se está recuperando con fuerza, por eso el tercer trimestre fue mucho mejor que el segundo”, señaló la presidenta de la entidad, Ana Botín.

No obstante, la entidad recordó que sus resultados se han visto afectados por la crisis, que se refleja en un entorno económico más débil, menores tipos de interés y fuerte depreciación de algunas monedas

El grupo bancario español se benefició de una reducción de los costos “más rápido de lo previsto”, con 500 millones de euros (590 millones de dólares) ahorrados gracias a las “sinergias” de un plan de eficiencia, contra 200 millones de euros en 2019.

En el segundo trimestre, el banco registró pérdidas netas por primera vez en su historia, de 11,129 millones de euros (13,155 millones de dólares), tras haber revisado a la baja el valor de varias filiales, entre ellas la de Reino Unido.

Para 2020, Santander confía alcanzar un beneficio ordinario “de unos 5,000 millones de euros” (5,910 millones de dólares), explica Botín en el comunicado sin detallar el resultado neto esperado.

El banco prevé distribuir unos dividendos de 0.10 euros por acción en 2021.

La mejora del tercer trimestre no logra sacar al grupo de los números rojos en los nueve primeros meses del año, en los que cosecha una pérdida neta de 9,048 millones de euros (10,640 millones de dólares).

Aunque su evolución fue menos fuerte en este trimestre, las provisiones vinculadas al riesgo de créditos impagados subieron hasta 9,500 millones de euros en los primeros nueve meses del año, un aumento de 42% respecto al mismo lapso de 2019.

Este monto debe permitir al banco hacer frente al peligro de que sus clientes no puedan pagar sus préstamos debido a la recesión causada por la pandemia.

En cuanto a la morosidad del grupo, se situó en 30,894 millones de euros a septiembre, 5% inferior a la del trimestre anterior.

Con información de AFP