Nada nuevo. Ante un mensaje esperado sobre las medidas de apoyo a pequeñas y grandes empresas frente a la contingencia sanitaria, que ocasionará una recesión económica inminente en el país, el presidente López Obrador delineó algunas medidas esta tarde, durante su informe trimestral por los 100 días de su segundo año de gobierno.

Estos puntos de acción ayudarían a las empresas, desde las micro, pequeñas y medianas (mipymes), hasta las grandes corporaciones, sin embargo no fue más allá de lo anunciado en días previos.

Primero detalló que se dará prioridad a empresas familiares, a las cuales ayudará con créditos del programa Tandas para el Bienestar.

También informo que se reiniciará pronto la recuperación económica a partir del aumento de inversión pública destinada a la creación de empleo y a otorgar créditos a pequeñas y medianas empresas familiares que se buscan la vida como pueden. No las vamos a dejar en el desamparo

Añadió que, en lo que va del año, se han entregado 356,000 créditos del programa Tandas para el Bienestar a pequeños negocios familiares; y en lo que resta de 2020, se agregarán 450,000 tandas más, con una inversión total de 3,400 millones de pesos.

Sobre las grandes compañías, el presidente reafirmó su posición de no apoyarlas este mes y de no rescatar a las corporaciones en caso de una bancarrota.

“Antes se contrataba créditos para el rescate de empresas y bancos. Se convertía la deuda de unos pocos en deuda pública”, dijo.

Al concluir una reunión en Palacio Nacional esta semana, entre López Obrador y los representantes de la iniciativa privada, Carlos Salazar y Antonio del Valle adelantaron que el discurso del presidente no tocaría el tema de los apoyos a las grandes firmas.

Sería hasta pasada la Semana Santa cuando se anuncien apoyos al respecto.

Al finalizar el informe del mandatario, que dio en el patio de Palacio Nacional, vacío, Gustavo de Hoyos Walter, presidente nacional de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), publicó en su cuenta personal de Twitter que no anunció medida alguna para afrontar la crisis económica provocada por el virus conocido como COVID-19.

Estas fueron las reacciones (enfurecidas) de otros dirigentes empresariales