El propietario de Twitter, Elon Musk, tomó la decisión de colocar su perfil en la red social en modo privado con el objetivo de comprobar si esta acción influirá de alguna manera en la interacción de sus tuits.
La medida del magnate llegó como respuesta a una serie de usuarios que aseguran que configurar una cuenta como privada mejora de forma importante el alcance de las publicaciones.
También este es uno de los últimos experimentos que Musk ha realizado en Twitter desde que adquirió la plataforma a fines de octubre pasado a cambio de 44,000 millones de dólares.
El comentarista de derecha Ian Miles Cheong tuiteó los resultados de una prueba que indica que un tuit publicado cuando su cuenta estaba configurada como privada recibió muchos más “me gusta” y visualizaciones que el mismo tuit publicado cuando la cuenta era pública.
Musk calificó esto como “extremadamente preocupante” y se comprometió a realizar él mismo el experimento.
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Más acciones de Musk en Twitter
Una de las decisiones más polémicas del también fundador de Tesla desde su arribo a Twitter fue la reactivación de cuentas que habían sido suspendidas por violar las políticas de la plataforma, incluida la del expresidente de Estados Unidos Donald Trump.
Desde la perspectiva de los especialistas, la restauración de cuentas, entre las cuales se incluyen algunas que pertenecen a conspiradores u opositores de la vacunación contra el COVID-19, podría abonar a la desinformación.
Asimismo, ha relajado su prohibición sobre la propaganda política, bajo el argumento de que esto permitirá “facilitar la conversación pública sobre temas importantes”.
Durante su breve mandato, Elon Musk también decidió implementar una función de conteo de visitas, aunque aclaró que se agregaría una configuración para permitir a los usuarios desactivarlo.
También se fijó un precio de suscripción de Twitter Blue de 11 dólares al mes tanto para suscriptores Android como iOS, además de ofrecer un plan anual “más económico”.
Con esto, la verificación de la palomita quedó disponible para cualquiera que quiera y pueda pagar y ya no sólo para los usuarios que contaban con cierto número de seguidores.
Otras actividades que ha realizado desde entonces incluyen una encuesta para preguntar a la gente si debería permanecer como director ejecutivo o cambiar la línea de tiempo de forma predeterminada a una fuente algorítmica.
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Con información de Bloomberg
