Durante el primer trimestre de 2021, las grandes petroleras de Estados Unidos y Europa regresaron a la rentabilidad, luego de uno de los años más complicados para la industria a causa de la pandemia de COVID-19.
Pese a la recuperación, impulsada en gran medida por los repuntes de los precios del petróleo gracias a los recortes de producción de la OPEP+ para estabilizar la oferta y la demanda, así como el despliegue de vacunas que provocó la recuperación de los viajes y el turismo.
Este viernes, Exxon Mobil reportó ganancias de 2,700 millones de dólares entre enero y marzo, por encima de lo esperado por analistas, mientras que en el mismo periodo del año pasado sufrió una pérdida neta de 610 millones de dólares.
Chevron, uno de los principales competidores de Exxon, registró una utilidad neta de 1,380 millones de dólares, tras una pérdida acumulada de 5,500 millones en 2020, de acuerdo con su reporte financiero dado a conocer antes de la apertura de Wall Street.
Las empresas, no obstante, indicaron que tuvieron dificultades en la actividad de refinación debido a la tormenta invernal que azotó la costa sur de Estados Unidos y que costó pérdidas millonarias a la industria, aunque esto no afectó sus resultados finales de forma significativa.
Las grandes petroleras estadounidenses no fueron las únicas beneficiadas por el alza de precios de energéticos, impulsada por el repunte de la inflación ante las políticas monetarias acomodaticias de los bancos centrales, a fin de acelerar la recuperación de la economía.
El gigante angloholandés Royal Dutch Shell reportó el jueves ganancias por 5,700 millones de dólares. En el primer trimestre de 2020, durante el comienzo de la pandemia, la compañía tuvo una pérdida de 24 millones.
Total, petrolera francesa, reportó una utilidad neta de 3,300 millones de dólares, diez veces más que en los 34 millones que obtuvo en el mismo lapso de 2020.
La empresa británica British Petroleum (BP) reportó el martes que sus ganancias netas subieron más del triple para colocarse en 2,600 millones de dólares en el primer trimestre del año.
Las compañías señalaron que los buenos resultados son reflejo de las medidas agresivas de reducción de costos que implementaron desde el año pasado, incluida una serie masiva de despidos de personal.
Aún así, la industria aún enfrenta problemas de cara al futuro, mientras más petroleras se inclinan por transformar sus negocios hacia las energías limpias, y en el corto plazo, ante un repunte récord de contagios de COVID-19 en India y Brasil que amenaza la recuperación completa de la demanda de combustibles fósiles.
¿Y las acciones?
En lo que va de 2021, el sector de energía es el más destacado en el índice S&P 500, por lo que las petroleras acumulan rendimientos de doble dígito, en línea con el alza de los petroprecios.
Tanto el WTI de Estados Unidos como el Brent del Mar del Norte cotizan por encima de los 60 dólares. El WTI alcanzó en febrero niveles no vistos desde 2019, previo a la irrupción de la pandemia, después de que en abril del año pasado cayó a territorio negativo por primera vez en su historia.
Precios del petróleo suben durante abril
Hasta el cierre del jueves, las acciones de Exxon suben 43%; las de Chevron, 22.8%; las de Shell, 8.8%, y las de Total, 4.3%, respecto a la última jornada de 2020.
Con información de AFP