Los cambios en los hábitos de los consumidores debido al trabajo en casa y las medidas de aislamiento ante la segunda ola de la pandemia ayudó a impulsar las ventas de snacks de Pepsi al cierre de 2020.
Además, al igual que su rival Coca-Cola, espera que el despliegue de los esfuerzos de vacunación provoque un repunte del crecimiento de sus ingresos en 2021.
Según el reporte del cuarto trimestre de 2002, publicado este jueves, los ingresos de la compañía de bebidas y alimentos crecieron 8.8%, a 22,460 millones de dólares, superando las expectativas de los analistas.
Las ventas orgánicas crecieron 5.7%, acelerándose desde el avance de 4.2% del trimestre previo, mientras que las utilidades netas aumentaron de 1,700 millones de dólares del cuarto trimestre de 2019 a 1,850 millones de dólares al cierre de 2020, es decir, 1.47 dólares por acción.
El crecimiento de la demanda por snacks como Tostitos y Cheetos y de bebidas como el Gatorade llevó a Pepsi a abrir su propio sitio web de venta directa a los hogares.
“Hemos descubierto cómo tener buenos resultados en este ambiente”, subrayó el CFO, Hugh Johnston, quien detalló que el mayor crecimiento provino de productos sin azúcar, bajos en calorías y saludables.
El negocio de ventas a restaurantes y máquinas expendedoras cayó a dos dígitos, mientras que las ventas orgánicas de bebidas en Norteamérica subieron 5.5%
Ramon Laguarta, CEO de Pepsi, explicó que esperan que los consumidores vuelvan a sus hábitos prepandémicos en la segunda mitad de 2021, pero anticipan que las compras en línea y más gente trabajando desde casa permanezcan.
Las acciones de Pepsi cotizan con una ligera baja de 0.8% en Nueva York, a 135.54 dólares, a las 11:30 am.
