Pemex renueva a KPMG como auditor, en medio de señalamientos por malas prácticas
El Consejo de Administración de Petróleos Mexicanos (Pemex) aprobó la designación de la firma KPMG Cárdenas Dosal, S.C. como su auditor externo para los ejercicios fiscales 2025 y 2026, en una sesión ordinaria celebrada el pasado 22 de mayo.
KPMG ha sido la firma encargada de auditar los estados financieros de Pemex desde 2019. Antes, dicha labor estaba a cargo de la firma Castillo Miranda y Compañía, S. C. (BDO Castillo Miranda), y previamente, de PricewaterhouseCoopers (PwC).
El Consejo también recomendó que las empresas filiales —Pemex Exploración y Producción, Pemex Transformación Industrial, entre otras— nombren a KPMG como su auditor externo para los mismos periodos, replicando los términos acordados con la matriz.
La renovación del contrato de KPMG ocurre unos días después de que la empresa del Estado confirmó la desinversión del Fondo Global de Pensiones del Gobierno de Noruega.
En un reporte fechado en noviembre de 2024, titulado “Recomendación de excluir a Petróleos Mexicanos de las inversiones del Fondo Global de Pensiones del Gobierno de Noruega (GPFG)”, se documentan algunos de los casos más controvertidos que ha enfrentado Pemex en los últimos años, y que han acentuado los problemas financieros de la petrolera.
Pemex da más de 200 mdp a KPMG
Pemex estima ejercer entre 166 millones y 207.5 millones de pesos, más el Impuesto al Valor Agregado (IVA), por la contratación de los servicios de auditoría externa de KPMG hasta 2026, según el documento ‘2024-67-PMX_SA_PC_GCSS-SASSA-AD-N-S’ emitido el 26 de abril de ese año.
KPMG especifica que entre los servicios que ofrece está “realizar un examen formal sobre los controles internos y sobre los registros contables (…) con el fin de comprobar que los estados financieros que se presentan son razonablemente correctos considerando la normatividad contable”.
No obstante, las revisiones a Pemex no han evitado los riesgos financieros y operativos que han afectado la estabilidad de la petrolera estatal.
Pasado turbulento
El caso más grande y conocido, por el que un exdirector general fue investigado, está relacionado con sobornos recibidos de la brasileña Odebrecht, de acuerdo con el informe del Fondo Global de Pensiones del Gobierno de Noruega. Se estima que la constructora habría pagado hasta 10 millones de dólares a Emilio Lozoya, exdirector general de Pemex, entre los años 2012 y 2014.
El propósito principal de los sobornos, según afirma el documento, fue asegurar el contrato para los trabajos preliminares en la refinería Miguel Hidalgo en Tula, Hidalgo.
Otro caso está relacionado con la empresa Altos Hornos de México (AHMSA), uno de los mayores productores de acero en el país, a la cual Odebrecht ayudó a transferir 3.7 millones de dólares en sobornos a través de una empresa fantasma. Este dinero también habría sido entregado a Lozoya.
Según el informe, el dinero fue transferido pocas semanas después de que AHMSA concretara la controvertida venta de la planta de fertilizantes ProAgro (anteriormente conocida como Agronitrogenados) a Pemex. La operación se cerró por 475 millones de dólares, aunque diversas estimaciones sitúan su valor real en apenas 50 millones.
Un tercer caso señalado es la adquisición del productor de fertilizantes Fertinal en 2015, al que la petrolera pagó aproximadamente 635 millones de dólares, a pesar de que varias firmas auditoras —junto con la propia Auditoría Superior de la Federación— advirtieron que Fertinal enfrentaba una situación financiera crítica, cercana a la insolvencia.
Otros casos de corrupción en Pemex
El documento del gobierno de Noruega destaca las acusaciones de sobornos por parte de Siemens en 2004, relacionadas con la modernización de una refinería en la región de Cadereyta. Se suman, además, denuncias de favoritismo respecto a ciertos proveedores e intentos de presentar facturas infladas con respecto a la planta petroquímica en Escolín en 2007.
También existen presuntas implicaciones en sobornos por parte de Hewlett-Packard para ganar un contrato de tecnología informática en el periodo 2008–2009. Y sobornos por parte de la empresa estadounidense de servicios petroleros Key Energy Services (KES) en 2010–2013, a cambio de ayuda con procesos de adquisiciones y la extensión de contratos.
A esta lista se suman otros escándalos que generan dudas sobre la eficacia y el rigor de las revisiones, lo que podría poner en entredicho la relación de la petrolera con sus auditores externos. A lo largo del tiempo, Pemex ha enfrentado múltiples cuestionamientos sobre su situación financiera, el manejo de deuda y la calidad de su información contable.
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