Los parques industriales que el gobierno está próximo a licitar en el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec (CIIT) tienen el potencial de detonar el desarrollo de la región sur del país, aunque deben darse varias condiciones para lograrlo.
Sergio Argüelles, presidente de la Asociación Mexicana de Parques Industriales Privados (AMPIP), mencionó que la nueva generación de parques industriales tanto aquí como en cualquier región debe ofrecer la posibilidad de desarrollarse de manera rápida, contundente, sostenible y exitosa.
Tenemos que analizar cuál es el panorama al que nos enfrentamos; sin embargo, es básico considerar la disponibilidad de infraestructura básica de primer nivel para realmente impulsar las operaciones de industria ligera y logística, se debe contar con buenos servicios, como agua, drenaje, seguridad 24 horas, y por supuesto energía. Además de buscar un equilibrio y respeto al medio ambiente
señaló en entrevista.
El empresario mencionó que si bien depende del tamaño, el desarrollo de un parque industrial requiere unos dos años como mínimo.
“Aunque depende mucho de su tamaño, un parque industrial lleva aproximadamente 3 meses de diseño e ingenierías, más otros 9 meses típicamente de urbanización sin considerar la infraestructura eléctrica, que puede llevar hasta 12 meses más”, apuntó.
El proyecto del Istmo, que otros sexenios han intentado sacar adelante sin éxito, tiene un potencial importante, que ayudaría a incorporar a otras regiones a la dinámica del sector exportador, de acuerdo con Alejandro Padilla, economista en jefe de Banorte.
“Si lo ves en términos de logística y costos es una competencia importante para el Canal de Panamá, nos ayuda a llevar productos a la costa este de Estados Unidos donde no tenemos el mismo impacto que en Texas, California o Michigan”, dijo en entrevista previa.
Argüelles coincidió en la importancia del proyecto, pero apuntó que se requiere tener claridad en su propósito y considerar factores desde la infraestructura básica hasta la cadena de suministro.
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10 polos
De acuerdo con un plan presentado el pasado marzo por el almirante Raymundo Morales, director del CIIT, el gobierno tenía previsto publicar la primera licitación por siete parques en la segunda semana de abril: Coatzacoalcos I y II, Texistepec. San Juan Evangelista, Matías Romero e Ixcaltepec.
Según el cronograma, los resultados se darían a conocer en julio y al última semana de agosto se publicaría la convocatoria para los tres polos restantes: San Blas, Ciudad Ixtepec y Santa Maria Mixtequilla, cuyo resultado sería público en noviembre.
Al cierre de esta edición no figuraba ninguna convocatoria en el sitio CompraNet, aunque en su conferencia matutina del viernes, el presidente Andrés Manuel López Obrador mencionó que podría demorar un poco más.
“Nosotros vamos, a más tardar en dos meses, ya a licitar la entrega de los terrenos para los 10 parques industriales, la Secretaría de Economía va a lanzar la convocatoria para que los interesados participen”, dijo el mandatario.
Argüelles comentó que en la AMPIP han tenido acercamientos con las autoridades para presentar las generalidades del proyecto.
“Seguramente pronto escucharemos los detalles del proyecto de subasta o licitación por parte del gobierno. Buscamos un diálogo abierto para intercambiar ideas con la administración pública”, dijo.
Potencial eólico
Entre los 10 polos de desarrollo, cuatro fueron clasificados con potencial de uso eólico y mixto: San Blas Atempa, Santa Maria Mixtequilla, Ciudad Ixtepec y Chivela.
En el Istmo, a unos 56 kilómetros de Ciudad Ixtepec se ubica el parque eólico La Venta III, uno de los activos que recientemente acordó comprar el gobierno a la española Iberdrola, aunque no está claro si se usaría para el proyecto en alguna medida.
“Hay energía eléctrica renovable, una de las plantas que se adquirieron a Iberdrola está ahí, es un parque eólico de generación de energía en el istmo; hay agua, gas, que es muy importante; internet”, dijo López Obrador en su conferencia matutina del viernes.
El pasado febrero, el presidente anunció que los parques eólicos serían administrados por la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y financiados por bancos estadounidenses.