En un lapso de seis años, la empresa Maxcom Telecomunicaciones se acogió por segunda vez al amparo del Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos, con el objetivo de facilitar la reestructura de su deuda que, de lograrlo, la empresa podría ‘resurgir de las cenizas’ solo para poder ser vendida a algún interesado de la industria, de acuerdo con analistas del sector.
La víspera, Maxcom anunció la aprobación de sus mociones de “primer día” por la Corte de Bancarrota de los Estados Unidos para el Distrito Sur de Nueva York, a través de un comunicado enviado a la Bolsa Mexicana de Valores, en el que garantiza que las operaciones en México continuarán sin interrupciones.
Dicha Corte programó para el próximo 17 de septiembre de 2019 la audiencia para considerar la aprobación del Plan de Reorganización del Capítulo 11 (preacordado por Maxcom) el cual, una vez aprobado, le permitirá a la empresa reestructurar la deuda a pagar en 2020 y ampliar el plazo para finiquitarla.
Maxcom anunció que también recibió la aprobación de la Corte para permitir que la compañía continúe pagando todas sus obligaciones a clientes, proveedores y otros socios comerciales clave, de la misma forma como lo ha hecho desde antes de presentar su petición del Capítulo 11.
La compañía, una vez aprobado el Plan del Capítulo 11, espera emerger rápidamente
señaló la empresa en un comunicado.
Este plan de reestructura, además, integra el compromiso de los accionistas de Maxcom de inyectar 300 millones de pesos al capital de la firma si la reestructuración financiera (ya sea realizada a través de la Oferta de Intercambio o el Plan) resulta exitosa, una inyección que supone una condición para la liquidación de la reestructuración financiera.
En 2013 se promulgó la reforma de telecomunicaciones y radiodifusión y, casi al mismo tiempo, Maxcom se acogió por primera vez al Capítulo 11. Desde entonces, la empresa ha visto el declive paulatino de su negocio, pues a 6 años de distancia, sus ingresos se han contraído casi 40%, en tanto que su flujo es 54% menor al de 2013, de acuerdo con datos de Bloomberg.
La mala situación de la empresa coincide con el el arranque de la reforma, un lapso que no le ha servido para mejorar y generar inversión, lo que demuestra que dicha reforma no estimuló la inversión de ningún jugador, incluido Maxcom, además de que no está siendo negocio para la firma, comentó Jorge Bravo, director general de Digital, Policy & Law.
Las telecomunicaciones son de inversión intensiva, actualización de redes y de nuevos servicios y Maxcom, de ninguna manera, está respondiendo a esta expectativa de la industria
dijo el analista del sector.
La venta, una opción
Maxcom es un operador que debería contemplar la venta de sus operaciones que podrían ser de interés para algún otro jugador, aseguró Ramiro Tovar Landa, analista del sector de telecomunicaciones y radiodifusión.
En ese sentido, el también académico del ITAM considera que esta jugada sería una buena oportunidad para otros, dado que las condiciones de corto y mediano plazo no son propicias para lograr una rentabilidad sostenida.
En cambio, otros operadores pueden rescatar ese capital físico. Y dado el entorno de competencia, es preciso afirmar que ninguna concesión garantiza la supervivencia de las empresas
comentó Tovar Landa.
Además de la deuda a corto plazo, los números de la empresa de telecomunicaciones no mienten. Al corte del segundo trimestre de este año, el valor de la empresa se contrajo 34.5% respecto al mismo periodo de 2013, mientras que la capitalización de mercado se redujo 1.9 veces en el comparativo.
La fibra óptica, su principal atractivo
A pesar del declive de la empresa, el principal atractivo de Maxcom es la fibra óptica que posee, que es uno de sus activos importantes, y que además se interconectan con Estados Unidos por lo que la reestructura tiene que ver con la intención de ’embellecerse’ para ponerse en venta o, en su defecto, transferir esos activos, agregó Bravo.
El también académico de la UNAM señaló que en justo el sector de telecomunicaciones demanda despliegue de fibra óptica, por lo que será el principal atractivo, sin embargo, sus líneas residencial y de negocios podrían no despertar mucho interés.
Esos negocios no son el principal atractivo, es lo que ha transferido, no ha crecido, no le genera ingresos suficientes, por lo que debe tener una estrategia adicional o venderla a algún interesado
agregó Bravo.
En mayo pasado Maxcom cumplió 20 años del inicio de sus operaciones comerciales, que actualmente abarca la oferta de telefonía local, larga distancia, transmisión de datos alámbricos, inalámbricos, celulares, servicios de televisión basados en tecnología IP.
Asimismo, ofrece también servicios de valor agregado en el área metropolitana de la CDMX, Monterrey, Puebla, Querétaro, León, Guadalajara, San Luis Potosí, Tehuacán y Toluca, así como en otras ciudades del país.
Así ha caído el precio de las acciones de la emisora que cotiza en la BMV: