Compañías estadounidenses siguen vendiendo componentes a la firma china Huawei, a pesar del veto que el presidente Donald Trump impuso a esas transacciones por motivos de seguridad nacional, informó el New York Times el martes.
Intel y Micron han encontrado formas de evadir las sanciones para vender mercancías elaboradas fuera de Estados Unidos, según cuatro personas con conocimiento de las ventas.
La empresa estadounidense Micron anunció el martes que había retomado la entrega de algunos componentes electrónicos a Huawei, al considerar que determinados productos no se veían afectados por el veto de Washington.
Los productos fabricados en el extranjero se consideran exentos de esa prohibición, lo que podría permitir a Huawei seguir vendiendo artículos como smartphones con componentes procedentes de esas empresas.
Durante mayo, Washington puso a Huawei en una lista de entidades que no pueden comprar componentes electrónicos en Estados Unidos sin permiso del gobierno de Trump, aunque la medida está suspendida de momento durante 90 días.
Estados Unidos teme que el gobierno chino espíe a través de los sistemas de telecomunicaciones de Huawei, pero la empresa china niega cualquier relación con el gobierno de Pekín.
“Como hemos discutido con el gobierno de EU, ahora está claro que algunos elementos pueden suministrarse a Huawei de acuerdo con la lista de entidades y las regulaciones aplicables”, escribió el presidente de la Asociación de la Industria de Semiconductores, John Neuffer.
Tras la medida de EU, las ventas de Huawei fuera de China cayeron 40% entre mayo y junio, informó previamente el fundador y CEO de la firma, Ren Zhengfei.
Reacciones
Micron detuvo los envíos a la firma china tras la acción del Departamento de Comercio el mes pasado, pero reanudó sus ventas hace dos semanas después de revisar las reglas de las listas de entidades, indicó el CEO Sanjay Mehrotra, citado por el NYT.
Un portavoz del Departamento de Comercio se refirió a una sección del aviso oficial sobre la adición de Huawei a la lista de entidades, incluido que el propósito era “evitar actividades contrarias a la seguridad nacional o intereses de política exterior de los Estados Unidos”.
Un chip, por ejemplo, aún puede suministrarse a Huawei si se fabrica fuera de los Estados Unidos y no contiene tecnología que pueda representar un riesgo para la seguridad nacional. Pero hay límites en las ventas de las empresas estadounidenses
dijo el ex funcionario del Departamento de Comercio, Kevin Wolf.
Con información de AFP