Insys no logró sortear la adversidad derivada de investigaciones sobre sobornos que hacían sus directivos para que profesionales de la salud recetaran en mayores cantidades el analgésico narcótico Subsys, el producto insignia de la farmacéutica.

Este lunes la firma estadounidense se declaró en bancarrota como la mejor solución que halló para maximizar el valor de sus activos y tratar las “cuestiones jurídicas existentes de manera justa y transparente”, según un comunicado.

Tras el anuncio, la acciones de la empresa tuvieron su segunda peor caída en bolsa desde su debut en 2013.

Qué es

  • Subsys es un aerosol sublingual de fentalino, un agonista narcótico sintético opioide para el tratamiento de pacientes con cáncer mayores de 18 años.
  • El fentanilo tiene una potencia que puede ser de 50 a 100 veces mayor que la morfina.

Así empezó el problema

  • Entre 2012 y 2015 directivos de Insys sobornaron a profesionales de la salud para prescribir Subsys en grandes cantidades.
  • Los pagos se realizaban a cambio de las intervenciones de estos médicos frente a otros profesionales de la salud para elogiar los beneficios del medicamento.
  • En mayo, como parte de un juicio en Boston, se determinó culpable al fundador del laboratorio John Kapoor y a otros cuatro directivos.

Insys logra acuerdo

  • Tras las acusaciones de soborno, la firma llegó a una acuerdo con el Departamento de Justicia de Estados Unidos para pagar 225 millones de dólares, según un reporte del gobierno la semana pasada.
  • El pago se desembolsará a lo largo de cinco años para poner fin a todas las demandas gubernamentales, penales y civiles.
  • Además del acuerdo, la empresa debe pagar aún millones de dólares de gastos judiciales.
  • La empresa indicó que seguiría pagando los sueldos de sus empleados y a sus proveedores y vendedores.

Sus ingresos

  • Durante años, la empresa ha actuado de manera ilegal, dando prioridad a los ingresos por encima de la salud de miles de pacientes, según el fiscal general de Massachusetts, Andrew Lelling.
  • En 2013, Insys reportó ingresos por 99.2 millones de dólares, un alza de 542% respecto al año anterior; en 2014 repuntaron 121% a 219 millones de dólares, y en 2015 el avance fue de 51% a 330.3 millones de dólares.
  • En 2018 tuvo ingresos por 82 millones de dólares, una disminución del 42% respecto a 2017.

La bancarrota

  • Este 10 de junio Insys se declaró en quiebra, por lo cual empezó a preparar la venta de sus activos.
  • La firma evalúa sus activos entre 100 y 500 millones de dólares.

Después de realizar una revisión exhaustiva de las alternativas estratégicas disponibles, determinamos que un proceso de venta supervisado por el tribunal es el mejor curso de acción para maximizar el valor de nuestros activos y abordar nuestros desafíos legales heredados de manera justa y transparente

CEO de Insys, Andrew G . Long.

La participación accionaria del fundador

  • El fundador John Kapoor posee 63% del capital, según el documento presentado este lunes ante el tribunal de quiebras de empresas de Delaware.
  • Un juez federal de Boston debe sentenciarlo el 18 de septiembre.

Debacle en Nasdaq:

  • La firma empezó a cotizar en Nasdaq en 2013.
  • Al cierre de su primer día en bolsa, sus acciones valían 3.17 dólares.
  • El máximo histórico del valor de la acción fue en julio de 2015 a 44.92 dólares.
  • Desde que estalló el escándalo, la acción que valía 13.38 dólares a inicios de enero de 2018 ha perdido casi todo su valor.
  • Tras el anuncio de quiebra, las acciones de la compañía cerraron este lunes con una pérdida de 51.45% a 0.64 dólares.

Con información de AFP