Nota del editor: Esta nota se publicó originalmente a las 14:30 y se actualiza con el precio al cierre del mercado.
Kodak, el gigante caído de la industria de la fotografía, ganó un préstamo por parte del gobierno de Estados Unidos para fabricar ingredientes que se utilizarán en medicamentos genéricos para combatir el coronavirus, reveló el Financial Times.
El gobierno de Donald Trump anunció la extensión de un préstamo de 765 millones de dólares a Kodak, ya que el gobierno de Estados Unidos intenta expandir la fabricación nacional a través de las cadenas de suministro médico para reducir la dependencia de países extranjeros, particularmente China.
Con el anuncio, las acciones de Kodak -que se declaró en quiebra en 2012 al no lograr adaptarse al auge de la fotografía digital- se dispararon hasta 225%, a 8.84 dólares.
Al cierre de la sesión, sus títulos treparon 206% a 8.02 dólares, su mejor precio desde agosto de 2017, de acuerdo con datos de Investing.
Kodak producirá tanto materiales de partida como ingredientes farmacéuticos activos, señaló el asesor comercial de la Casa Blanca, Peter Navarro, en una entrevista con Fox Business.
Si hemos aprendido algo de la pandemia mundial es que los estadounidenses dependen peligrosamente de las cadenas de suministro extranjeras para sus medicamentos esenciales,
aseguró Navarro.
El préstamo será otorgado por la Corporación Financiera de Desarrollo Internacional de Estados Unidos (DFC, por sus siglas en inglés) en virtud de la Ley de Producción de Defensa, la cual Donald Trump ha invocado para comprar máscaras N95 y acelerar la fabricación de ventiladores.
El presidente emitió una orden ejecutiva en mayo autorizando al DFC a hacer préstamos o compras que fortalecerían las capacidades de fabricación de Estados Unidos en la lucha contra COVID-19.
Al respecto, el DFC señaló que el proyecto de Kodak marcaría el primer uso de esa autoridad.
La administración del primer mandatario estadounidense ha presionado para repatriar la producción de suministros médicos y productos farmacéuticos, en medio de las preocupaciones sobre la dependencia de China y otros fabricantes extranjeros.
La Administración de Alimentos y Medicamentos estima que alrededor del 80% de los ingredientes farmacéuticos activos se fabrican fuera del país.
Muchos medicamentos genéricos eran escasos antes de la pandemia, pero durante el apogeo de la crisis, muchos hospitales lucharon por obtener medicamentos, incluidos sedantes y anestésicos, vitales para los pacientes con respiradores.