Kansas City Southern (KSC) y Canadian National Railway (CN) confirmaron este viernes que llegaron a un acuerdo para fusionarse, lo que daría lugar a la creación del “principal ferrocarril del siglo XXI”. 

Estamos encantados de que KCS haya acordado fusionarse con CN para crear el principal ferrocarril del siglo XXI. Me gustaría agradecer a las numerosas partes interesadas de ambas empresas que han demostrado un apoyo abrumador para esta fusión convincente,

dijo el CEO de CN, JJ Ruest

Los accionistas de KCS recibirán 325 dólares por acción ordinaria según la oferta más reciente de CN, lo que implica un valor total de la empresa de 33,600 millones de dólares, incluido el supuesto de aproximadamente 3,800 millones de deuda de KCS. 

Además, los accionistas de KCS recibirán 200 dólares en efectivo y 1,129 acciones ordinarias de CN por cada acción ordinaria de KCS, y se espera que los accionistas de KCS posean el 12.6% de la empresa combinada. 

Esto representa una prima implícita del 45% en comparación con el precio de cierre de las acciones de KCS del 19 de marzo de 2021.

De acuerdo con KSC, las sinergia de la fusión se traducirá en un EBITDA de 1,000 millones de dólares anuales. 

“Como una empresa continental más grande con rutas complementarias y una plataforma mejorada para el crecimiento de ingresos, inversión de capital y creación de empleo, estaremos posicionados para cumplir con las poderosas sinergias de la transacción que crearán nuevas oportunidades de crecimiento”, apuntó el CEO de KS, Patrick J. Ottensmeyer.

El anuncio se da un día después de que Canadian Pacific Railway —la otra firma interesada en la fusión— mandó una carta a KCS pidiendo que rechazara la propuesta de CN.

El objetivo de la fusión 

La combinación de CN y KCS acelerará la creación del principal ferrocarril del siglo XXI, al conectar el corredor industrial de América del Norte: de México a Canadá. 

Esto ayudará sustancialmente a realizar los muchos beneficios del T-MEC, dándole vida de una manera significativa, indicaron las firmas en un comunicado.

“Esta fusión creará una ruta exprés que conecta Estados Unidos, México y Canadá con un servicio de un solo propietario y un solo operador sin interrupciones, y preserva el acceso a todas las puertas de enlace existentes para mejorar las opciones de ruta y garantizar una sólida competencia de precios”, señalaron las compañías ferrocarrileras.

La fusión está sujeta a la aprobación de la Junta de Transporte de Superficie (STB, por sus siglas en inglés) y en México por la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) y el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT).