Johnson & Johnson (J&J) fue condenada este lunes a pagar 572 millones de dólares por daños al estado de Oklahoma por su papel en la crisis de adicción a los opioides, una decisión judicial histórica en Estados Unidos.
El juez Thad Balkman dijo que los fiscales habían demostrado que la multinacional estadounidense contribuyó al “perjuicio público” con la promoción engañosa de analgésicos de receta médica altamente adictivos.
Esas acciones comprometieron la salud y la seguridad de miles de personas de Oklahoma,
sostuvo.
Esta decisión puede llevar a otros fabricantes de medicamentos a buscar acuerdos con las partes acusadores antes de llegar a un juicio, destacó el Financial Times.
Las acciones de J&J subieron hasta 4% en operaciones tras el cierre del mercado pues, aunque histórico, el monto está muy por debajo de los 17,000 millones de dólares que el fiscal general de Oklahoma, Mike Hunter, estaba buscando.
La empresa dijo que apelará la sentencia, argumentando que “ni los hechos ni la ley la respaldan”.
La demanda buscaba que Johnson & Johnson ayudara a atender la crisis de adicción a los opioides durante los próximos 30 años, a través de programas para la prevención y el tratamiento de adicciones, pero el juez determinó que la empresa solo pague los costos de un año del plan, al considerar que la fiscalía no dio evidencia suficiente sobre los recursos necesarios para más años.
El juicio se dio después de que Oklahoma logró acuerdos con el fabricante de OxyContin Purdue Pharma, por 270 millones de dólares y con Teva, por 85 millones de dólares.
Con información de AFP y Reuters