Innovasport fue la excepción durante la pandemia por COVID-19 en la industria del vestido. Por un lado, su especialización en la venta de ropa y calzado deportivo -categorías menos afectadas durante la contingencia sanitaria- y el fortalecimiento de su canal de comercio electrónico ayudaron a que saliera librada.

La empresa cuenta con dos divisiones: Innovasport, dedicada a la venta de ropa, calzado, aparatos y accesorios deportivos, e Innvictus, enfocada a la venta de tenis y moda urbana.

No vimos una afectación en nuestras ventas a pesar del cierre de tiendas físicas por más de la mitad del año, gran parte de las ventas fueron de ropa para hacer ejercicio y equipos durante los primeros meses de la pandemia

dijo Sergio Borrego, director de suministro e innovación de Innovasport en entrevista con EL CEO.

La resiliencia mostrada por esta categoría de ropa no fue exclusiva para la empresa. Por ejemplo, el CEO de Liverpool destacó en conferencia con analistas a inicios del año que las prendas para hacer ejercicio “no sufrieron en absoluto, de hecho, le fue bastante bien”.

Por su parte, Emilio Penhos, presidente de la Cámara Nacional de la Industria del Vestido (Canaive), comentó en una entrevista previa que la indumentaria cómoda como pants y playeras holgadas fueron algunas de las piezas más vendidas. Durante la pandemia se tomaron medidas de distanciamiento social y de autoaislamiento como medida para prevenir contagios.

La suspensión de eventos sociales, el trabajo remoto, la educación de todos los niveles a distancia, así como el cierre de lugares de consumo hicieron que las personas no tuvieran una necesidad de adquirir nueva ropa.

De tal forma, el valor de venta de las prendas de vestir sufrió una contracción de 28.6% a 364,900 millones de pesos en 2020, en comparación con 2019. En tanto, e volumen de ventas cayó 33.2% en el mismo lapso, de acuerdo a datos del Inegi.

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Comercio electrónico, la llave

Por otro lado, el comercio electrónico para la empresa jugó un papel fundamental durante la contingencia. Innovasport multiplicó por siete su volumen de ventas en línea, debido a que sus sucursales físicas permanecieron cerradas.

Ahora, la participación online dentro de sus ventas es de 20%, frente al 8% que representaba en años anteriores y estiman que crezca, pero a un menor ritmo en el futuro.

“Tenemos el 100% de nuestras tiendas abiertas, pero con la incertidumbre si nuestro comprador en línea abandonaría este canal. Si bien hubo decrecimiento frente al Hot Sale del año, fue solo del 15% y todavía contamos con volúmenes importantes en línea”, comentó Borrego.

Para 2026 espera que la penetración de su ventas digitales alcance el 30% del total.

En tanto, Erick MacKinney, country manager de Adyen, dijo que las retailers que capitalizaron la oportunidad presentada en 2020 con una buena experiencia de compra en línea para sus usuarios, podrán repuntar sus ventas totales con la unión de lo físico y digital.

El objetivo es reabrir las tiendas este año y seguir explotando, así como desarrollando el canal digital mientras las unidades se recuperan, bajo el esquema de comercio unificado. Eliminar la barrera entre lo físico y digital para mejorar la experiencia del usuario

dijo MacKinney.

Para mantener el ritmo de crecimiento de su e-commerce, Innovasports destinará el 50% de sus inversiones programadas a la digitalización de la compañía, es decir para robustecer sus procesos, personas y tecnología.

Incluirán robustecer nuestra huella logística, lo que va detrás del servicio del comercio electrónico y la propia plataforma digital

comentó el directivo.