Nota del editor: A esta nota se le añadió el crecimiento nominal por línea de producto de la ANTAD a las 13:00 horas del 15 de abril

La industria del vestido fue una de las más afectadas durante el año pasado con caídas en su valor y volumen de ventas, debido a diversas variantes detonadas por la pandemia de COVID-19 que terminaron por desgarrar al sector, pero parece encontrar en 2021 un año de reconfiguración.

El valor de ventas para la categoría de prendas de vestir sufrió una contracción anual de 28.6% a 364,900 millones de pesos al cierre del año pasado, de acuerdo a datos del Inegi.

En cuanto a su volumen de ventas -entre piezas, juegos y pares-, cayó en promedio 33.2% en el mismo lapso.

El cierre de tiendas departamentales y especializadas, el de escuelas, la implementación del trabajo remoto y el cambio de hábitos dentro de casa, golpearon al sector.

La afectación en la industria es notoria. Varios factores influyeron, desde la suspensión de clases que derivó en la no compra de uniformes escolares, hasta en trabajo a distancia y la cancelación de eventos y fiestas

dijo en entrevista para EL CEO Emilio Penhos, presidente de la Cámara Nacional de la Industria del Vestido (Canaive).

No obstante, las categorías de ropa deportiva y asociadas a la comodidad vieron un crecimiento en ventas durante el año pasado.

El propio CEO de Liverpool, Gracio Guichard, adelantó en su última conferencia con analistas que las categorías de deportes fue una de las más favorecidas.

La ropa deportiva no sufrió en absoluto, de hecho, le fue bastante bien (…) Vamos a tener un cliente menos formal, que prefiera ropa cómoda y creo que también veremos un poco menos de moda

comentó Guichard a inicios de 2020.

Con la caída en ventas también va la reducción del empleo en el sector. A febrero de este año, los puestos se redujeron 11.8% al contabilizarse 281,351 con respecto al mismo mes de 2019, de acuerdo a datos de la Canaive con información del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). De esta manera, alcanzó su peor nivel desde al menos el 2018.

Así mismo, existió una reducción de 7.2% en el número de establecimientos dedicados a la venta de ropa, o el cierre en números absolutos de 638 tiendas, en el mismo lapso.

De manera particular Grupo Axo, única empresa pública dedicada en su totalidad al segmento, reflejó en sus estados financieros la afectación. Reportó una pérdida neta de 541 millones de pesos; una caída anualizada en su flujo operativo (EBITDA, por sus siglas en inglés) para el año completo de 31% a 1,846 millones de pesos y sus ingresos retrocedieron 2% a 12,868 millones, donde las ventas digitales representaron el 30% de las totales, según su último reporte trimestral.

2021, año clave

Mientras el año transcurre y avanza el proceso de vacunación, la industria se muestra confiada en una recuperación, pero sin volver a ser la misma antes de la emergencia sanitaria.

“La industria del vestido es un tanto incierta, porque más allá de saber si regresa donde estaba, se tendrá una reconfiguración en muchos sentidos: en el canal de ventas de los retailers, e-commerce, las categorías de ropa que han cambiado, así como factores externos como el regreso a clases, uso de uniformes y otros”, dijo Penhos, que asumió su puesto hace menos de un mes.

En el terreno digital, moda es la segunda categoría que las personas más prefirieron comprar a través de canales digitales en 2020, solo superado por la de comida a domicilio, revela el estudio de la Asociación Mexicana de Ventas Online (AMVO).

En tanto, el CEO de Liverpool estimó que será hasta el segundo semestre de 2021 cuando las ventas de ropa presenten un mayor impulso.

La gente, los clientes, quieren salir y van a ver a sus amigos que no han visto en bastante tiempo, pero va a cambiar la forma en que te vistes

comentó.

Un dato alentador que apoyan los ánimos del presidente de la Canaive, es el dado a conocer esta semana por la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicios y departamentales (ANTAD), donde las ventas de sus agremiados regresaron a territorio positivo luego de tres meses seguidos de pérdidas.

Las ventas de aquellas que tuvieron un año o más de operación avanzaron 6.5% en comparación de marzo 2019, y para totales de 8.8% en el mismo periodo.

De manera desagregada por línea de mercancía, ropa y calzado fue la que tuvo el mayor crecimiento, con un alza de 53.6% para tiendas iguales y de 56.2% para tiendas totales.