IEnova vio un aumento de 12% anual, a 126.6 millones de dólares en su utilidad durante el segundo trimestre de 2020, a pesar de una ligera disminución en sus ingresos, según su reporte trimestral.
Este desempeño se debe en gran medida a la entrada en operación del gasoducto Texas-Tuxpan, en el que IEnova participa con el 40%.
La compañía reportó ingresos por 276.4 millones de dólares durante el segundo trimestre del año, lo que representa una disminución del 12.8% anual.
El flujo operativo (EBITDA) de IEnova fue de 178.6 millones de dólares, una caída del 9.2% comparada con los 196.6 millones registrados en el mismo periodo del año pasado.
La diferencia principal para el mejor desempeño este año fue la participación en las utilidades de negocios conjuntos, principalmente impulsado por la entrada en operación del ducto Texas-Tuxpan.
Los ingresos por gas representaron el 74.9% de los ingresos de la compañía este trimestre, con la electricidad aportando un 19.7% y el almacenamiento un 14.5%.
La compañía dijo que ha operado ininterrumpidamente y sin reducir sueldos a sus trabajadores, y reportó además una sana línea de crédito y efectivo que suman 1,100 millones de dólares: suficiente para tener un capital de trabajo saludable.
IEnova informó a sus inversionistas sobre los dos amparos promovidos en contra de las políticas de confiabilidad del Centro Nacional de Control de Energía y la Secretaría de Energía (Cenace), y reveló que piensa promover una demanda más en contra del cambio a las cuotas de contratos legados, y que un fracaso en esta encomienda transmitirá los costos a sus clientes.
