GNC se acogió al Capítulo 11 de la Ley de Bancarrota en Estados Unidos esta semana, pero GNC México permanece sin ningún rasguño y apuesta a las ventas en línea a pesar de tener sus unidades abiertas.

En México, la empresa especializada en productos como vitaminas, suplementos y proteínas es controlada por Maxiva, una firma de origen nacional “financieramente sólida”, de acuerdo con la propia compañía, independiente a la estadounidense.

GNC refrenda su compromiso con México y continuará fortaleciendo sus operaciones en el país con inversiones y propuestas innovadoras que han colocado a la compañía como líder en el mercado

compartió GNC en un comunicado.

EL CEO pudo constatar en un recorrido que las tiendas GNC operan de forma normal dentro de algunas plazas comerciales de la Ciudad de México.

La apuesta en línea

“GNC decidió abrir su tienda oficial en la plataforma de e-commerce (Mercado Libre). Apuesta así por fortalecer el canal de ventas online a través de su alianza con la plataforma más importante de la región”, compartió Mercado Libre.

Tan solo durante la temporada de promoción conocida como Hot Sale en el país, que fue del 23 de mayo al 1 de junio, la plataforma de origen argentino registró un aumento de hasta 150% en las ventas de proteínas y suplementos alimenticios, derivado a que las personas optaron por ejercitarse en casa, mientras los gimnasios permanecen cerrados a consecuencia de la pandemia.

GNC suma más de 2,000 colaboradores y controla 585 tiendas en el territorio mexicano, además de tener más de 30 años de historia en el país, según datos de la compañía.

Otra historia en Estados Unidos

El 24 de junio la empresa estadounidense se declaró en quiebra, con un plan que incluía cerrar 1,200 de sus unidades físicas en el país vecinos del norte -de las 5,800 que posee-, después del duro impacto en sus ingresos derivados de las medidas tomadas por el gobierno para contener el avance del SARS-CoV-2 y de compromisos de pago adquiridos que no pudieron ser liquidados.

“El proceso del Capítulo 11 nos permitirá (…) invertir en las áreas apropiadas para evolucionar en el futuro, mientras mejoramos nuestra estructura de capital y balance”, dijo la firma estadounidense en un comunicado.

Las deudas de le empresa ascendieron a 895 millones de dólares al final del primer trimestre de 2020 y solo tenía 137 millones en efectivo en su balance general.

La estadounidense quiso ganar tiempo en febrero de 2018, cuando refinanció préstamos y organizó una inversión de 300 millones de dólares por Harbin Pharmaceutical Group. De esta forma, la compañía de origen chino se convirtió en la accionista mayoritaria de GNC, de acuerdo a una nota de Bloomberg.