La automotriz estadounidense Ford informó este lunes que prevé una pérdida antes de impuestos de 600 millones de dólares en ganancias durante el primer trimestre del año, debido al impacto del COVID-19 en sus ventas y producción, lo que provocó que sus acciones cayeran hasta 6.5%.
A las 12:10 p.m. (horario de Ciudad de México), los títulos de la compañía retroceden 5.49% y se venden en 5.07 dólares, de acuerdo con datos de Bloomberg.
La empresa dijo a analistas que la estimación de pérdidas trimestrales antes de impuestos excluye 300 millones de dólares en artículos especiales.
Ford estima ingresos de 34,000 millones de dólares en el trimestre enero-marzo, una pérdida de 15.5% en comparación con los 40,300 millones del mismo lapso de 2019.
Las ventas de vehículos de la empresa se desplomaron 21% en los primeros tres meses de 2020, respecto al mismo periodo del año previo. A finales del mes pasado, Ford cerró sus plantas en Norteamérica, Asia y Europa, debido a la propagación del coronavirus en esas regiones y ante las medidas sanitarias impuestas por las autoridades.
A principios de abril, Ford dio a conocer que tuvo una baja de 12.5% de sus ventas en Estados Unidos, donde los segmentos de camionetas y SUV generan la mayor parte de sus ganancias.
En China, donde el número de casos ha disminuido, las operaciones de Ford se llevan a cabo con normalidad.
El fabricante de vehículos señaló que está trabajando para reiniciar sus actividades gradualmente durante el segundo semestre de 2020, pero cualquier decisión se tomará “en cooperación con sindicatos locales, proveedores, distribuidores y otras partes interesadas”.
Ford detalló que cuenta con suficiente efectivo para operar, al menos, hasta el final del tercer trimestre sin incrementar la producción de vehículos.
“Creemos que tenemos suficiente dinero para operar al menos hasta el final del tercer trimestre sin producción incremental de vehículos ni ventas al por mayor o acciones financieras“, dijo el director financiero Tim Stone en un comunicado.
Cuando se le preguntó si Ford solicitaría préstamos del gobierno estadounidense o de la Reserva Federal, un portavoz de Ford afirmó que, a diferencia de la Gran Recesión, todavía hay mucha liquidez en los mercados de capitales.
“Tenemos una amplia gama de opciones” para obtener financiamiento adicional si es necesario, dijo el portavoz.
El efectivo de la compañía ascendía a 30,000 millones de dólares al 9 de abril y más de la mitad provenía de dos líneas de crédito utilizadas en emergencias.
La automotriz puso en marcha medidas para preservar el efectivo, como la reducción de los costos operativos, gastos de capital y diferir porciones de los salarios de ejecutivos, mencionó Stone.
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Con información de Reuters y AFP
