Tan sólo cuatro días pasaron para que Ford actualizara sus proyecciones para el primer trimestre recién concluido.

La compañía estimó este viernes una pérdida de 2,000 millones de dólares y dijo que aprovecharía los mercados de deuda para apuntalar sus reservas de efectivo, en momentos en que el brote de coronavirus ha detenido la producción y golpeado las ventas de vehículos.

El lunes informó dio a conocer la estimación de una pérdida, antes de impuestos, por 600 millones de dólares en ganancias y gastos extraordinarios de 300 millones de dólares.

El segundo fabricante de automóviles de Estados Unidos ya suspendió los dividendos y obtuvo más de 15,000 millones de dólares de dos líneas de crédito para evitar los daños a su negocio por la pandemia.

La compañía, que tiene su sede en Dearborn, Michigan, presentó el viernes una oferta de deuda, pero no reveló el monto.

Al 9 de abril, la compañía tenía alrededor de 30,000 millones de dólares en efectivo en su balance.

Las ventas de vehículos de Ford a los concesionarios cayeron 21% en el primer trimestre, en comparación con el mismo periodo de 2019. En marzo, la compañía cerró plantas en América del Norte y Europa debido al COVID-19.

Sólo las empresas conjuntas de Ford en China, donde la pandemia ha retrocedido, producen vehículos y los concesionarios han reanudado el trabajo.

Con información de Reuters