La empresa Construcciones y Auxiliar de Ferrocarriles (CAF), que opera el Tren Suburbano, está a cuatro kilómetros de distancia para ser el medio de transporte que comunique al nuevo aeropuerto de Santa Lucía con el centro de la capital del país.
De acuerdo con información de la empresa, se requeriría un trámite legal “que no sería gran problema”, el cual consistiría en la ampliación del título de concesión que actualmente tiene la empresa para comunicar a los usuarios de la estación de Buenavista -en el centro de la ciudad- con la nueva terminal aérea.
Se tendría que ampliar cuatro kilómetros el título de concesión que actualmente tenemos que va de (la estación del Tren Suburbano) Lechería a San Miguel Xaltocan, para llegar hasta la actual base militar en Santa Lucía
dijo Max Noria, director de comercialización de Ferrocarriles Suburbanos.
De acuerdo con el directivo, existe una vía ya existente que cubre esos cuatro kilómetros faltantes. La longitud final del ramal propuesto sumaría 22 kilómetros.
CAF, con la mira puesta en los proyectos del Acuerdo Nacional de Infraestructura
La empresa de origen español tiene el interés en los ocho proyectos ferroviarios que contiene el Acuerdo Nacional de Infraestructura, firmado por la iniciativa privada y el gobierno federal a finales del mes pasado.
Sin embargo, en los que ha manifestado mayor interés son los dos ramales del Tren Suburbano: Cuautitlán-Huehuetoca y Lechería-Xaltocan-Santa Lucía.
La inversión para estas dos vías se elevaría a los 15,840 millones de pesos, según los datos del acuerdo. El plazo para su puesta en marcha oscila entre 2021 y 2024.
“Nosotros estaremos interesados en todos los ramales que existan en el Sistema Uno del Tren Suburbano, pero tenemos que saber los esquemas que planteará la autoridad y, con base en eso, nosotros como empresa privada tomaremos las decisiones pertinentes”, comentó Noria.
El directivo no definió el modelo que se usaría para llevar a cabo estos proyectos, pero mencionó como opción la Asociación Público Privada (APP), concesión y desdoblamiento. Este último permite asociar nuevos proyectos a concesiones existentes, lo que daría continuidad a la extensión de la vía.
Toluca, otra historia
CAF fue la compañía elegida para dotar de los trenes que correrían el Tren Interurbano México – Toluca.
El proyecto se encuentra parcialmente detenido y plagado de irregularidades. Hasta el momento, la inversión que realizó la firma en la compra de los vagones está detenida.
De acuerdo al presupuesto de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, se destinarán 6,507 millones de pesos para este propósito en 2020, aunque en el Acuerdo Nacional de Infraestructura se indica que serán necesarios 20,000 millones.
Con información de Liz Cervantes