Las empresas ligadas a la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) y que cotizan en la Bolsa Mexicana de Valores resistieron la cancelación oficial del proyecto.
Hasta el viernes, los grupos aeroporturarios, aerolíneas, cementeras y constructoras tuvieron movimientos mínimos desde el 3 de enero, día en el que se anunció la suspensión definitiva.
El castigo más importante a sus acciones ya había ocurrido y lo recibieron desde el 24 de octubre, cuando el presidente de México convocó a una consulta ciudadana para definir el futuro del proyecto. Es decir, a las empresas le afectó más la especulación que la realidad.
¿Pero ya pasó lo peor?
Para Grupo Aeroportuario de Pacífico (GAP), Grupo Aeroportuario Centro Norte (OMA) y Grupo Aeroportuario del Sureste (ASUR) la cancelación oficial del proyecto anunciada la mañana del jueves 3 de enero prácticamente fue irrelevante.
Al cierre de la sesión bursátil del viernes, un día después del anuncio, OMA anotó un alza de 1.3% al cerrar con un precio de 98.81 pesos por acción; Asur de 3% con un precio de 310.83 pesos y GAP de 3.2% con 167.78 pesos por acción.
Si embargo, desde el 24 de octubre, las tres empresas acumulan caídas de 21, 9.7 y 11%, respectivamente.
De acuerdo con Roberto Solano, analista de Monex, la cancelación del proyecto podría implicar un reordenamiento de rutas de las aerolíneas nacionales y contracción en las rutas internacionales de aerolíneas extranjeras a aeropuertos locales, al percibir retos de logística en los traslados con la nueva propuesta de aeropuertos del gobierno.
Aún así, las empresas crecerán, dice el especialista.
“Nosotros esperamos que los grupos aeroportuarios sigan creciendo este año con una rentabilidad muy similar a la de los últimos tres años”, dijo Solano.
Líneas aéreas
La cancelación del NAIM y la propuesta del nuevo gobierno obligará a las aerolíneas a repensar sus planes y rutas y hará que los tres grupos aeroportuarios ajusten en promedio 331 vuelos diarios que se realizan de la Ciudad de México a más de 30 destinos.
Eso impactaría de inicio a las líneas aéreas locales como Aeroméxico, Volaris, Interjet y VivaAerobus, según cálculos de Monex.
Sin embargo, para Volaris y Grupo Aeroméxico la noticia tampoco tuvo un impacto inmediato en Bolsa. En la sesión del viernes, Volaris cerró con un alza de 8.9% a 11.37 pesos por acción. Mientras que Aeroméxico concluyó la sesión con un alza de 2.7% a 23.10 pesos.
Cementeras
Cemex, que planeaba proveer alrededor de 900,000 metros cúbicos de concreto para el NAIM, registró una caída de 1.63% desde el precio que tenía previo al anuncio y hasta el cierre de la sesión del viernes con un precio de 9.61 pesos.
Sin embargo, los analistas niegan que esto se deba al efecto NAIM.
Desde mi perspectiva la cancelación del NAIM no tiene impacto en CEMEX, al menos en lo que la empresa ya suministró porque el pago a proveedores está garantizado en las liquidaciones que harán
Iván Santiago, director general y de Inversiones de BlackBull Advisors.
“Sí le afecta en cuanto a la expectativa que tendrían para seguir suministrando concreto, pero no considero que este sea el detonante para su caída. Más bien ha sido arrastrada por la volatilidad que ha habido en el mercado en general”, agregó.
El volumen de concreto que Cemex vendería para el NAIM representa un volumen de apenas 1.7% de los 53 millones de metros cúbicos de concreto que vende al año, añadió Solano de Monex.
Desde el 24 de octubre, Cemex acumula una caída de 11.7%.
Constructoras
Grupo Carso, pese a ser una de las empresas que más contratos ganó para la construcción del NAIM, también resistió la cancelación oficial del proyecto en Bolsa.
El precio de sus acciones registraron un alza de 3.2% del 3 al 4 de enero con un precio de 74.27 pesos por título.
La empresa, propiedad de Carlos Slim, participaba a través de su división de infraestructura en la construcción del edificio terminal y una de las pistas del aeropuerto.
Carso acumula un alza de 23% en el precio de sus acciones desde octubre.
