Después de días de negativas, Elon Musk cedió a la presión y cerrará la planta de ensamblaje de de Tesla en Fremont, California, a partir del lunes 23 de marzo.

Las autoridades de ese estado ordenaron esta semana que las personas permanezcan en cuarentena en sus hogares para evitar contagios de COVID-19, pero el CEO de la automotriz se negó a cerrar la planta, argumentando que su labor era esencial.

“En los últimos días, nos hemos reunido con funcionarios locales, estatales y federales. Hemos y seguiremos siguiendo todas las instrucciones legales y pautas de seguridad con respecto a las operaciones de nuestras instalaciones”, dijo Tesla este jueves.

“A pesar de tomar todas las precauciones de salud conocidas, las operaciones continuas en ciertos lugares han causado desafíos para nuestros empleados, sus familias y nuestros proveedores”, agregó.

La fábrica de Tesla en Nueva York también frenará su producción, excepto por las operaciones que tengan que ver con las cadenas de suministros necesarias para el servicio e infraestructura, dijo la compañía en un comunicado.

A inicios de la semana, el empresario sudafricano avisó a sus trabajadores que las actividades dentro de la planta continuarán de forma normal, pero instruyó a los empleados que presenten síntomas a quedarse en sus hogares.

El jueves, la armadora comenzó a extremar sus precauciones y dio a conocer que tomaría la temperatura de sus empleados para descartar que presenten síntomas de COVID-19, además de promover el distanciamiento social y el uso de cubrebocas.

En días pasados, el condado de Alameda, donde se encuentra asentado el fabricante de vehículos eléctricos, ordenó a todos los negocios ‘no esenciales’ suspender sus operaciones a medida que el estado registró un aumento de contagios que ya se aproximan a los 1,000.

A través de su cuenta de Twitter, el empresario ha opinado en diversas ocasiones que el pánico generado por el coronavirus es excesivo y que incluso pasará factura a los tratamientos para atender otras enfermedades.

Entre las medidas empleadas esta semana por el gobernador de California,  Gavin Newsom, está una inversión de 150 millones de dólares para proteger a las 150,000 personas en situación de calle en el estado, así como la asignación de fondos de emergencia para financiar la educación a distancia, luego de que las escuelas cerraran sus puertas.

Tesla podría fabricar ventiladores para pacientes con COVID-19

Luego de la presión que recibió Tesla por no frenar la producción, Musk dio a conocer en Twitter que la compañía fabricaría ventiladores de uso médico para tratar a pacientes diagnosticados con coronavirus en caso de que haya escasez en los hospitales.

“Tesla fabrica automóviles con sofisticados sistemas de climatización. SpaceX fabrica naves espaciales con sistemas de soporte vital. Los ventiladores no son difíciles, pero no se pueden producir al instante. ¿Cuáles son los hospitales que tienen la escasez de la que hablas ahora?”, dijo el fundador de Tesla un tuit.

Aunque seguidores de Musk afirmaron que ya hay escasez de esos equipos, tal como han reportado diversos hospitales de menor tamaño, el CEO de Tesla pidió detalles sobre los lugares.

Las automotrices GM y Ford, que ya enviaron a sus empleados a trabajar desde casa en medio de la crisis desatada por la pandemia, dieron a conocer que producirán equipo médico ante el desabasto en los hospitales.