Walt Disney, uno de los principales anunciantes de Facebook, decidió recortar su gasto publicitario en la plataforma en medio del boicot emprendido por grandes empresas en contra de la firma por el manejo del discursos de odio en esa red social.

En los primeros seis meses del año, Disney fue una de las principales anunciantes de Facebook; de acuerdo con la firma de investigación Pathmatics Inc, invirtió aproximadamente 210 millones de dólares en anuncios en Estados Unidos, mientras que en 2019 fue el segundo anunciante, sólo detrás de Home Depot Inc, informó The Wall Street Journal.

Disney, a diferencia de otras compañías, no hizo pública su decisión de reducir el gasto en Facebook, cambió los planes de manera silenciosa, principalmente porque ha detenido la publicidad de su servicio de transmisión de video Disney +, dijeron a WSJ personas familiarizadas con la situación.

Disney también detuvo el gasto en Instagram, que es propiedad de Facebook, para su servicio de transmisión Hulu, comentaron las fuentes. De acuerdo con el análisis de Pathmatics, Hulu gastó 16 millones de dólares en Instagram del 15 de abril al 30 de julio.

Otras divisiones de la compañía revisan su publicidad en la plataforma, por ejemplo Freeform cuyos anuncios han desaparecido prácticamente del sitio y aunque hay menos programas en el mercado durante el verano, es poco probable que los anuncios vuelvan cuando se necesiten nuevos episodios, a menos que la plataforma social se comporte mejor, destacaron fuentes cercanas.

Sin embargo, Disney también tiene otro motivos para no comercializar otras áreas de negocio, pues la pandemia los obligó a cerrar sus parques temáticos, mientras que el estudio de cine de Disney que suele ser agresivo en su gasto publicitario, ha tenido que retrasar lanzamientos de nuevas películas debido al cierre de cines.

Los representantes de Disney no hicieron comentarios.

“Sabemos que tenemos mucho que hacer”: Facebook

Empresas como Unilever PLC, Starbucks Corp., Ford Motor Co., Verizon Communication Inc. y muchos pequeños comerciantes han tomado la decisión de retirar su publicidad de Facebook, mientras que grupos de derechos civiles como la Liga Anti-Difamación y NAACP, pidieron a los anunciantes que retiren el gasto publicitario para julio, pues argumentan que Facebook no ha hecho suficientes progresos para hacer cumplir sus políticas sobre el discurso de odio y la difusión de noticias falsas.

Stop Hate for Profit, el nombre de la coalición detrás del esfuerzo de boicot, ha establecido 10 pasos que quiere que Facebook tome, como la adopción de “cambios de sentido común” en sus políticas para reducir el odio en sus plataformas y eliminar contenido que podría inspirar a las personas a cometer violencia.

Los ejecutivos de Facebook, incluida Carolyn Everson, vicepresidenta de su Grupo de Negocios Globales, dijeron previamente a los anunciantes que la compañía no cambiaría sus políticas en función de la presión sobre los ingresos.

“Sabemos que tenemos más trabajo por hacer”, dijo Facebook en un comunicado, y agregó que trabajaría con grupos de derechos civiles, un grupo líder en comercio de publicidad y otros expertos “para desarrollar aún más herramientas, tecnología y políticas para continuar esta lucha”.

También señala que ha bloqueado a 250 organizaciones de supremacía blanca tanto en Facebook como en Instagram y que su inteligencia artificial le ayuda a detectar casi 90% de los discursos de odio antes de que alguien los denuncie.

Facebook recibe alrededor de 70,000 millones de dólares en ingresos publicitarios anuales, generados por más de ocho millones de anunciantes, especialistas consideran que se necesita un boicot sostenido por parte de sus principales anunciantes para afectar económicamente a la empresa.

Con información de The Wall Street Journal