Pese al apoyo que ha recibido por parte de la administración encabezada por el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), la deuda de Petróleos Mexicanos (Pemex) sigue siendo muy alta, al punto de poner en riesgo las operaciones del sector petrolero.

La Asociación Mexicana de Empresas de Hidrocarburos (Amexhi) aseguró que la falta de pago por parte de la empresa del Estado pone en riesgo las actividades petroleras, las metas de producción, así como la viabilidad financiera de proyectos de extracción ya en marcha. 

Pemex

 

Al cierre de septiembre, la firma dirigida por Octavio Romero Oropeza contaba con una deuda financiera de más de 105,836 millones de dólares, mientras que a sus proveedores no les había realizado un pago por 17,220 millones de dólares, según datos de la propia empresa. 

Por ello, Amexhi hizo un llamado para dar pronta solución a lo que calificó de “situación crítica”, ello en una carta enviada a Miguel Ángel Maciel, titular de la Secretaría de Energía; y a Rogelio Ramírez de la O, quien encabeza la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP). 

Algunas de las empresas afectadas han notificado oficialmente a Pemex el impacto que tienen estos retrasos en su posición financiera

se señaló en el documento. 

Pemex tiene el apoyo de AMLO

Durante el gobierno de López Obrador, Pemex ha recibido más de 70,000 millones de dólares en capitalizaciones, amortizaciones de deuda, rebajas y beneficios fiscales. 

Sin embargo, ello no ha sido suficiente para sacar a la compañía del bache en el cual se encuentra desde hace varias administraciones.

La petrolera apenas ha podido evitar la declinación de su producción de crudo y condensados —que ronda 1.9 millón de barriles por día—, poniendo en duda la promesa del presidente de lograr la autosuficiencia de México en combustibles hacia el final de su mandato en 2024.   

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Con información de Reuters