Las exportaciones Pemex vieron una ligera recuperación en abril, para colocarse en 1.179 millones de barriles diarios, pero su valor se desplomó a 502 millones de dólares: la cifra más baja en al menos cinco años. El precio promedio de las exportaciones fue de 14.18 dólares por barril, una caída de 80.2% comparado con octubre de 2018, de acuerdo con las estadísticas petroleras de la propia compañía.
La producción de crudo de la empresa vio una ligera caída con respecto a la de marzo, al pasar de 1.745 a 1.72 millones de barriles diarios, una disminución de 1.5%. La producción total de hidrocarburos líquidos se colocó en 1.955 millones de barriles diarios, el segundo nivel más bajo desde el pasado diciembre, debido en parte a la baja en la demanda producida por la pandemia de coronavirus.
En contraste, la producción nacional de gasolinas y diésel presentó un avance y se colocó en 365.2 miles de barriles diarios, lo que representa el mayor volumen desde agosto del año pasado.
Las importaciones de gasolina y diésel también decrecieron como consecuencia de la baja demanda, y se colocaron en 224 y 110.9 miles de barriles diarios respectivamente, su nivel más bajo en los últimos cinco años. Mientras tanto, las importaciones totales de petrolíferos cayeron 45% para colocarse en 409 miles de barriles diarios: el nivel más bajo desde 2015.
La suspensión temporal de actividades industriales impactó también la demanda de energía eléctrica y, por lo tanto, la importación de gas natural se colocó en 772.6 millones de pies cúbicos diarios, su nivel más bajo en los últimos cinco años.
Con estos movimientos la balanza comercial de Pemex se situó en 79 millones de dólares, un cambio brusco comparado con el mes anterior, cuando reportó un saldo negativo de 404 millones de dólares: su segundo mejor nivel desde noviembre de 2018.