Chanel ha comprado una participación minoritaria en Max Büsser & Friends (MB&F), empresa de relojes suizos, con el objetivo de posicionar a la marca de moda francesa en la industria de la alta relojería y, a su vez, dará seguridad financiera al fabricante independiente con sede en Ginebra.

MB&F, compañía fundada por Maximilian Büsser en 2005 y conocida por sus diseños inusuales y movimientos innovadores, venderá una participación del 25% a Chanel, dijo la compañía de relojería fina en un comunicado el jueves.

La venta de la participación se produce después de que MB&F triplicó sus ingresos en tres años. “Garantizará que esta empresa nos sobreviva”, dijo el fundador y director creativo Maximilian Büsser.

El acuerdo con la marca francesa promete aportar estabilidad al fabricante de relojes en medio de una caída en la demanda de relojes caros en toda la industria después del auge de la pandemia. En 2023, la firma con sede en Ginebra produjo 419 relojes de pulsera y obtuvo ingresos de 53.3 millones de dólares (mdd).

Chanel sigue invirtiendo en relojería de lujo

Maximilian Büsser conservará una participación mayoritaria del 60% en el negocio, en comparación con el 80% anterior, mientras que Serge Kriknoff, director de l+D y producción de MB&F, posee ahora una participación del 15%.

Además el acuerdo otorga a Chanel un derecho de preferencia sobre sobre cualquier venta futura de participaciones en la empresa, que tiene alrededor de 60 empleados y espera aumentar las ventas en un 5% este año. También evitará la posibilidad de ofertas de adquisición no deseadas después de su eventual salida.

La compañía con sede en Ginebra genera listas de espera para los compradores a pesar de que los precios pueden superar los 100,000 dólares por pieza. No obstante, Büsser señaló que la espera para algunos relojes se han acortado a tan solo seis meses.

Para Chanel el acuerdo aporta credibilidad a sus operaciones de fabricación de relojes. La marca francesa fabrica unos 75,000 relojes de su propia firma al año y, de acuerdo con Morgan Stanley, factura unos 400 millones de francos suizos, lo que la convierte en una de las 25 mayores empresas relojeras de Suiza.

El posicionamiento de MB&F

Las creaciones de MB&F abarcan desde relojes de pulsera hasta relojes de escritorio caracterizadas por sus formas orgánicas con figuras de animales, automóviles, naves espaciales o futuristas.

La compañía de relojes cuenta con dos boutiques en Ginebra y otra en Dubai y mediante MB&F Labs —concepto de tiendas donde combina la venta de relojes y obras de arte– tiene presencia en París, Taipei, Singapur y Los Ángeles. También vende sus productos a través de diversas tiendas multimarca de alta gama como Watches of Switzerland.

Büssier dijo que la marca está planeando una serie de lanzamientos especiales para celebrar su 20 aniversario en 2025. El acuerdo con la marca con sede en Reino Unido preservará “la locura y la creatividad”, por las que MB&F se ha hecho conocida, señaló.

Mientras que la compra de Chanel es parte de la estrategia a largo plazo de la firma francesa para preservar, desarrollar e invertir en conocimientos especializados, dijo Fréderic Grangié, presidente de relojes y joyería fina de Chanel.

Con información de Bloomberg

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