La radio tradicional en México es un medio que ‘suena fuerte’ en muchas ciudades del país y su audiencia es tan diversa como el número de estaciones AM y FM que existe en todo el cuadrante, un hábito que se mantiene y cambia en cada plaza gracias a la oferta y manejo de la programación de los radiodifusores.
Si bien entre las principales ciudades con mayor audiencia de radio están la Ciudad de México (el Valle de México) y Monterrey -dos de las principales ciudades del país-, Guadalajara no está en el ‘Top 10’ de las ciudades con mayor alcance de personas según su población.
Lo anterior, de acuerdo a un estudio realizado en 53 ciudades del país por INRA, una empresa dedicada a la medición de audiencias de radio y TV que apenas el año pasado cumplió 70 años de historia.
Si bien el tamaño de la población de cada una de las ciudades en las que INRA realizó la medición es distinta, en 10 ciudades el alcance de la población es mucho mayor, una penetración que se compone de una audiencia de personas mayores de 8 años que enciende la radio de lunes a viernes.
Las mediciones se levantan a través de distintas muestras con cierta periodicidad, pues la escucha de la radio cambia constantemente.
Es por ello que, para obtener los datos de este alcance de la población en cada una de las ciudades que se muestran en el ‘Top 10’, los estudios se realizaron en diferentes meses en un lapso que va de mayo de 2018 hasta junio de este año.
La población escucha más la radio entre semana que sábado y domingo y la proporción de alcance varía notablemente en cada una de las ciudades que integran el estudio.
La diversidad de la radio radica en que México es un país que se caracteriza por ser ‘muy regional’, es decir, que cada zona está segmentada porque la audiencia tiene distintos intereses de música, información y contenido, comentó a EL CEO Luis Mercader Martínez, director de INRA.
En opinión del directivo, la regionalización es un elemento importante a la que la radio tiene que adaptarse, así como a ser más selectiva y específica respecto a la audiencia a la que quiere llegar bajo qué oferta de contenido.
La radio universal ya no existe, hay segmentación por nivel socioeconómico, por edades, por sexos, por intereses, por estilo de vida; y la radio se tiene que adaptar a eso
agregó Mercader Martínez.
En ese sentido, comentó que las estaciones de radio que más se han adaptado son las habladas, es decir, las frecuencias cuyo contenido es informativo y noticioso, superando a las estaciones musicales, de las cuales muchas se han mantenido con el mismo formato durante años, lo que ha provocado que eventualmente pierdan audiencia.
Para Mercader Martínez, si bien la adopción de los medios radiodifundidos tiende a ir a la baja, lo que sucede en la televisión de manera más acelerada que la radio, hay ciudades en las que no se escuchaba radio y la audiencia ahora está al alza.
Lo anterior, en su opinión, obedece a varias razones: la radio es la única que da la inmediatez, que es totalmente anónima y gratuita, que se puede escuchar haciendo cualquier otra actividad y que, además, se puede llevar a todas partes, a diferencia de la TV.
Los tiempos cambian
Alrededor de un 17% de la audiencia que escucha la radio tradicional actualmente lo hace a través de un smartphone, aseguró Mercader, pues incluso por mandato del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), todos los equipos integran un radiorreceptor para escuchar Frecuencia Modulada (FM).
Este mandato generó un cambio de escenario que incrementó la audiencia de radio, principalmente de población joven que estaba dejando la radio porque el cambio de hábitos contempla otros intereses como internet y ante este nuevo panorama la radio está recuperando audiencia, dijo el director de INRA.
Otra audiencia relevante es la de los automovilistas pues, en promedio, en seis de cada 10 autos se enciende la radio mientras los conductores realizan sus traslados.