En este Buen Fin, los consumidores sufren por el tráfico en las calles, la búsqueda de estacionamiento en los centros comerciales y las largas filas a la hora de pagar, pero pronto todo eso será cosa del pasado.
De aquí a 20 años, el comercio será totalmente diferente, destaca Euromonitor International, gracias a la aplicación de nuevas tecnologías que, además, abren la puerta al surgimiento de nuevos canales de negocio.
Hacia 2040, el comercio requerirá más cambios en infraestructura, incluyendo el rediseño de los establecimientos comerciales para poner al cliente en el centro de todas las estrategias.
En la tienda
A nivel global, 47% de los consumidores conectados dice que acude a una tienda principalmente para “ver y probar antes de comprar”, explica Euromonitor International.
En el futuro, escáneres en las entradas podrán identificar al cliente, para ofrecerle una experiencia más personalizada.
Y en cada uno de los departamentos, habrá adecuaciones para permitir usar los artículos antes de comprarlos, por ejemplo, un cuarto con temperatura controlada para descubrir que tan abrigadora es una chamarra o un área con diferentes superficies para probar zapatos deportivos.
El uso de impresión 3D y la realidad virtual se extenderá a más tiendas físicas que, además, aprovecharán las capacidades de los wearables para guiar a los clientes por sus instalaciones, permitiéndoles añadir productos a su carrito de compras virtual para luego recibirlos directamente en sus domicilios.
¿Y el pago? Se hará automáticamente cuando el consumidor abandone la tienda, sin necesidad de hacer fila.
Desde el hogar
Para 2030, 65% de los hogares tendrá conexiones de banda ancha, frente al 45.5% en 2018, subraya Euromonitor International, lo que abrirá la puerta a mayor interacción inteligente entre las personas y las cosas, con la mayoría de los dispositivos del hogar conectados a internet para 2040.
“El hogar conectado será el centro de control de la vida del consumidor”, afirma la consultora.
Al llegar a su hogar, el consumidor será reconocido por escáneres, que abrirán las cerraduras inteligentes automáticamente.
Esto detonará una orden para que un dron entregue las compras que esperan en un almacén cercano, de manera que se reduzca el robo de paquetes que se dejan en la entrada de las casas sin nadie presente.
¿Quedarse sin nada que comer? Jamás. Los productos que se consumen y compran continuamente, ya sean alimentos o artículos de limpieza, estarán monitoreados por los dispositivos, que automáticamente ordenarán más cuando estén a punto de acabarse.
En la récamara, espejos conectados mostrarán cómo se ven diferentes vestuarios, sin necesidad de probarse físicamente la ropa, al tiempo que monitores de salud den reportes en tiempo real sobre las calorías ingeridas y gastadas, entre otras estadísticas vitales.
Además, los asistentes robóticos serán imprescindibles, tanto en materia de seguridad, como para realidad actividades sencillas o proporcionar compañía y entretenimiento a niños y a adultos mayores.