La transición de México a las energías limpias avanza paulatinamente en todo el país; sin embargo, en la Ciudad de México, se ha logrado poner en marcha un proyecto único: la planta fotovoltaica de la Central de Abasto (CEDA) de Iztapalapa.
Esta obra es parte de la Política Energética Sustentable para la Ciudad de México 2019-2024 la cual busca impulsar el desarrollo económico de la capital a través del aprovechamiento de las fuentes renovables de energía, aumento de la eficiencia energética y optimización de la demanda en el sector productivo.
La construcción de esta planta quedó a cargo del gobierno de la capital y tuvo una duración de más de tres años, las cuales se enfocaron en labores de instalación y construcción. La inversión que se dio para lograr este proyecto fue de más de 661 millones de pesos (mdp).
Así luce la central fotovoltaica de la Central de Abasto
La planta fotovoltaica de la Central de Abasto de la CDMX se inauguró el pasado 20 de febrero y como parte del proyecto, se entregó a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) su funcionamiento y mantenimiento, la cual es catalogada como la más grande del mundo.
Esta planta fotovoltaica está conformada por 21 hectáreas y está colocada sobre los techos de la Central de Abasto que juntos conforman 32,000 paneles solares.
La importancia que tiene esta obra es tal que la planta fotovoltaica tiene una capacidad instalada de 18 megawatts (MW) y generará hasta 25 gigawatts (GW) anuales, lo que servirá para iluminar las áreas comunes de la Central de Abasto, así como los locales de la misma.
Esta nueva planta, según lo dicho por la CFE, garantiza a los locatarios y a los trabajadores de la Central de Abasto el uso de “energía limpia y barata”.
Los beneficiados por la obra
Según lo publicado por la la Secretaría de Desarrollo Económico de la CDMX y la Comisión Federal de Electricidad (CFE), estos son los puntos más destacados de los beneficios de la obra:
- Los locatarios y comerciantes de la Central de Abasto, los ciudadanos que asisten o trabajan en este lugar, así como la Ciudad de México y su población en general son los principales beneficiados.
- Se tendrá un ahorro económico para la CEDA por consumo de electricidad para las áreas comunes.
- Ingresos adicionales por la colocación de la electricidad en la red eléctrica nacional.
- Impermeabilización de naves de la CEDA antes de instalar la infraestructura fotovoltaica.
- Contribución al combate del cambio climático y mejoramiento del ambiente.
La CFE detalló que esta nueva planta dejará un ahorro de 3.5 millones de pesos de consumo de electricidad, lo que representa la mitigación de 11,4000 toneladas de dióxido de carbono y una forestación de 29,000 árboles de pino y su cuidado durante 50 años.
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