Grupo México se dijo sorprendido después de que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) publicó en el Diario Oficial de la Federación el decreto de la toma de Ferrosur el pasado 19 de mayo; sin embargo, el presidente habría informado al propietario del grupo minero, Germán Larrea, sobre sus próximos movimientos dos días antes.
No sólo López Obrador y Larrea sostuvieron dos reuniones la semana pasada en Palacio Nacional, sino que además dos fuentes afirmaron que el grupo minero recibió diversas propuestas por parte del secretario de Gobernación, Adán Augusto López, y del presidente para ceder al Estado los derechos de sus tramos ferroviarios concesionados, según se señala en la columna de Mario Maldonado, publicada en El Universal.
(…) Tras dos reuniones previas, se antoja difícil que Germán Larrea y su Grupo México califiquen de ‘sorpresiva e inusitada’ la acción militar y el decreto para tomar el control de 120 kilómetros de vías férreas concesionadas a su subsidiaria Ferrosur
comenta el periodista.
De acuerdo con las fuentes, la mañana del miércoles 17 de mayo fue el momento en que López Obrador avisó a Larrea sobre la necesidad imperiosa de que la Marina tomara el control de los tramos comprendidos entre Coatzacoalcos y Medias Aguas, en Veracruz.
Ante lo expuesto por López Obrador, el magnate de la minería y accionista principal de Grupo México no se negó y, según las fuentes, se mostró colaborativo. Además le aseguró al presidente que buscarían opciones para que el gobierno y los efectivos de la Marina pudieran circular libremente por dichos tramos.
No te pierdas: Toma de Ferrosur no es un asunto personal con Germán Larrea: AMLO
Larrea habría insistido en construir una segunda vía
Durante las reuniones, el llamado “Rey del Cobre” habría insistido en la construcción de una segunda vía para uso y aprovechamiento de la empresa Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec, financiada con las regalías que Grupo México entrega al Estado por el uso de la concesión.
Sin embargo, fue un mal cálculo de Larrea, ya que la propuesta de una segunda vía habría sido desechada anteriormente por la administración de AMLO.
De manera que ofrecer una nueva infraestructura financiada con recursos que tendrían que ir a parar a las arcas públicas era despertar otra vez el apetito del presidente, no tanto por la figura de ‘expropiación’, sino de la recuperación de una concesión pública
escribió el columnista.
Ante todo este escenario, no fue una sorpresa para Grupo México encontrarse con el decreto de ocupación del tramo ferroviario y, mientras tanto, la negociación se mantiene en pie, pero ante una postura rígida de Larrea, el gobierno ahora prepara la revocación y retiro de la concesión.
En tanto, los almirantes de la Secretaría de Marina (Semar), a cargo de Rafael Ojeda, son los más interesados en tomar control inmediato de las vías y de los patios de operación de Ferrosur.
Para los marinos resulta una prioridad que se les otorgue este proyecto, cuando se han visto marginados ante la bonanza que hoy experimenta el Ejército.
