El peso mexicano se deprecia al cierre de este miércoles y se ubica en su peor nivel desde el pasado 31 de mayo, cuando cotizó en 17.6886 unidades. Asimismo, concretó su tercera jornada consecutiva cediendo terreno frente al billete verde. 

La divisa nacional se vio afectada por las preocupaciones de que la Reserva Federal (Fed, por sus siglas en inglés) continúe con su política monetaria rígida por más tiempo;  por el nerviosismo que ha permeado en los últimos días el mercado inmobiliario chino, en particular, por el destino de Evergrande, y el anuncio de un posible cierre del gobierno en Estados Unidos el próximo 1 de octubre.

De acuerdo con datos del Banco de México (Banxico), la moneda mexicana cerró este miércoles con una pérdida de 0.86% ante el dólar y el tipo de cambio cotiza en 17.6880 unidades por divisa estadounidense

Durante las operaciones del día, el peso marcó un mínimo de 17.47 y un máximo de 17.81 pesos por dólar de acuerdo con datos de Bloomberg.

Al menudeo, el billete verde se vende en 18.09 pesos en ventanillas de Citibanamex, 12 centavos más caro que el día previo. 

El índice dólar, que mide el desempeño de la divisa frente a una canasta de las seis monedas más operadas, sube 0.44% para ubicarse en 106.70 unidades.

 

 

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Atención en China y EU

La atención del mercado se centró en conocer más información sobre el destino del sector inmobiliario de China, tras el revés al plan de reestructuración de Evergrande que incrementó más los riesgos en el sector. 

Por otro lado, el presidente de la Fed de Minneapolis, Neel Kashkari, señaló que hay 40% de posibilidades de que el banco central estadounidense necesite incrementar las tasas de interés “significativamente” para vencer la inflación. 

En este sentido, la tasa de interés promedio para hipoteca a tasa fija a 30 años en Estados Unidos tuvo un aumento de 10 puntos base, a 7.41% en la semana que concluyó el 22 de septiembre. 

El incremento marcó la tercera semana consecutiva con aumentos, lo que ha impulsado los costos de endeudamiento a nuevos máximos no vistos desde diciembre del año 2000, después de que la Fed provocará una subida de los bonos del Tesoro. 

Además, el ánimo de los inversionistas ha pesado por el nerviosismo en torno a un posible cierre parcial del gobierno estadounidense si es que el Congreso no proporciona financiamiento para el año fiscal que inicia el 1 de octubre, lo cual de acuerdo con la agencia calificadora Moody’s sería negativo para el perfil crediticio. 

A nivel local, la mirada está puesta en la publicación del próximo jueves de la decisión de política monetaria de Banxico, que se espera conserve una vez más sin cambios su tasa de referencia en un récord histórico de 11.25%.

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Con información de Monex y Reuters