Para las empresas que cotizan en la bolsa, ser parte del Índice de Precios y Cotizaciones (IPC) es un logro al que pocas pueden tener acceso.

En el más reciente rebalanceo, anunciado por Standard & Poor’s este lunes, GMéxico Transportes y Lala dejan su lugar en el principal índice de la Bolsa Mexicana, que será ocupado por Grupo Carso y Bolsa.

Para el rebalanceo semestral, se considera que la empresa cuente con un float de más de 10% y una mediana del valor diario de transacciones de al menos 50 millones de pesos o de 30 millones de pesos para acciones vigentes durante los tres y seis meses previos a los movimientos.

De igual manera se toma en cuenta que las acciones tengan operaciones en 95% de los días durante los últimos seis meses.

“Las compañías que pierden operatividad, que pierden flow, son las que salen”, explica el socio fundador de SNX, Carlos Ponce.

Pero entrar al IPC no significa adquirir un mayor valor de mercado o mejores utilidades a largo plazo, ya que “por lo general, las empresas que entran y salen del IPC dentro de las 35 empresas del índice no llegan a tener un peso importante”, subraya Ponce.

Según datos del último rebalanceo de S&P, Femsa cuenta con una ponderación de 12.67% dentro del IPC, seguida por América Móvil con 12.24%.

Qué ganan las que entran

Al ser seleccionadas para entrar al índice, los fondos como BlackRock, que replican al IPC para que los inversionistas pasivos puedan invertir en él, tienen que recomponer sus ETF con las nuevas emisoras y deshacerse de las que van de salida con el fin de rebalancearlo.

Esto genera una demanda de sus acciones, pero los analistas aseguran que es de corto plazo.

“Siempre va a ser un impulso positivo en el corto plazo para las emisoras el que entren a cotizar al IPC”, asegura el director de operaciones en Black Wallstreet Capital, Guillermo Delgado.

“Ganan exposición, ganan que el público inversionista extranjero y también el nacional que tiene estrategias pasivas empiece a invertir en estos nombres”, añade Delgado.

Estos son los resultados trimestrales y el comportamiento de las acciones de Grupo Carso y Bolsa:

Qué pierden las que salen

Las empresas que salen pueden presentar pérdidas de carácter temporal, ya que los fondos buscan vender sus títulos para recomponer su portafolio, pero el impacto no va más allá.

Incluso su precio objetivo no se ve afectado porque “no tiene que ver la parte fundamental o la parte de la emisora per se del comportamiento que haya tenido en los últimos reportes trimestrales”, como es el caso de Grupo México Transportes, que presentó una utilidad neta de 1,149 millones de dólares durante 2018. 

“(Los buenos reportes trimestrales) les dan un plus para que aunque no coticen dentro del IPC y es un activo que pudiera tener una buena perspectiva de mediano a largo plazo, los inversionistas estén interesados en poner cierto capital en la misma emisora aunque ya no forme parte del índice”, indica el director de operaciones en BWC.

Estos son los resultados trimestrales y el comportamiento de las acciones de las dos emisoras que dejan el IPC:

Lala

GMéxico Transportes