El petróleo cerró al alza y registró fuertes ganancias semanales, ya que creció la preocupación por una caída en las exportaciones rusas luego de la imposición de un límite de precios por parte de los países del G7 a principios de este mes.

El crudo West Texas Intermediate para entrega en febrero subió 2.6% para cerrar en 79.56 dólares el barril, extendiendo su ganancia semanal a 6.9%. El contrato del mismo mes del Brent avanzó 3.6% para ubicarse en 83.70 dólares el barril, con un aumento semanal del 6.2%. 

 

Ambos contratos registraron sus mayores ganancias semanales desde el periodo que finalizó el 7 de octubre.

El viceprimer ministro de Rusia, Alexander Novak, dijo el viernes a la televisión estatal que Rusia podría reducir la producción de petróleo entre 5% y 7% en 2023, según informes de prensa.

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Exportaciones de crudo ruso se desploman

Bloomberg informó a principios de esta semana que las exportaciones totales de crudo transportado por mar de Rusia se desplomaron en 1.86 millones de barriles por día, o 54% semana tras semana, a solo 1.6 millones de barriles por día en la semana que finalizó el 16 de diciembre. 

Rusia todavía está sopesando su respuesta a la imposición de un embargo de la Unión Europea sobre las importaciones de crudo ruso transportado por mar y un tope de precio de la Unión Europea sobre el crudo ruso que entró en vigor el 5 de diciembre.

Por otro lado, TC Energy informó este viernes que recibió permiso del gobierno de Estados Unidos para reiniciar el segmento del oleoducto Keystone que se había cerrado después de un derrame de alrededor de 14,000 barriles de crudo en un arroyo de Kansas a principios de este mes. 

Comenzaremos actividades para respaldar el reinicio seguro del segmento, incluidas pruebas e inspecciones rigurosas, y esto llevará varios días

dijo la compañía en un comunicado.

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Con información de MarketWatch