Los precios del petróleo subieron más de 2% este martes, para tocar máximos de un año, después de que los principales productores mostraron que están restringiendo el bombeo en línea con sus compromisos.
El petróleo estadounidense WTI ganó 2.3%, hasta los 54.76 dólares, el más alto desde enero del año pasado, de acuerdo con datos de MarketWatch.
Mientras que el Brent subió 2%, a 57.46 dólares el barril, en su tercer día consecutivo de ganancias, para cerrar en su mejor nivel desde el 21 de febrero de 2020.
Las alzas se producen tras un año complicado a causa de la irrupción de la pandemia de COVID-19, que limitó la demanda y arrastró a los precios. En abril de 2020, el WTI entró a territorio negativo por primera vez.
2020, mal año para las petroleras
UBS pronostica que el Brent alcanzará los 63 dólares el barril en la segunda mitad de este año y los 65 dólares en el primer trimestre de 2022.
La producción de crudo de la OPEP aumentó por séptimo mes en enero, pero el alza fue menor de lo esperado, según un sondeo de Reuters. Además, Arabia Saudita implementará recortes voluntarios de un millón de barriles diarios desde principios de febrero hasta marzo.
El bombeo de Rusia también aumentó el mes pasado, pero en línea con el acuerdo de reducir la producción, mientras que en Kazajistán el volumen de petróleo cayó.
“Con la OPEP y sus aliados esforzándose por mantener la producción mundial de petróleo por debajo de la demanda, esperamos que los inventarios de petróleo sigan cayendo”, dijo UBS en una nota.
Un Comité Técnico Conjunto de la alianza, que se reunió este martes, revisó las perspectivas de la demanda y el cumplimiento de los países con los recortes de producción acordados. El panel ministerial de la OPEP se reúne para revisar el mercado el miércoles.
Bajo un escenario base, el comité espera que el mercado del petróleo sea deficitario durante 2021, alcanzando un máximo de dos millones de barriles por día en mayo.
El repunte cobró más fuerza porque el Congreso de Estados Unidos parecía dispuesto a aprobar un paquete de estímulo económico, y cuando el frío en el noreste del país impulsó la demanda por combustible de calefacción.
Con información de Reuters