Los precios del petróleo rompen este viernes una racha de seis semanas consecutivas de ganancias por los temores sobre una segunda ola de contagios de COVID-19 y sus posibles impactos sobre la demanda.

A las 2:05 p.m. (horario de Ciudad de México), el contrato de julio del WTI de Estados Unidos pierde 0.03%, a 36.33 dólares por barril, y el crudo Brent del mar del Norte sube 0.83%, a 38.87 dólares, de acuerdo con datos de Bloomberg.

Respecto al viernes pasado, ambos referenciales pierden más de 8%, debido a una estrepitosa caída el jueves, cuando el WTI retrocedió más de 9%.

Este viernes, Barclays aumentó su pronóstico del precio del barril en cuatro dólares para este año, aunque advirtió que la recuperación será lenta en el corto plazo.

“El ritmo de cambio en los fundamentos posiblemente se moderará significativamente, ya que la mejoría de la demanda incremental dependerá del comportamiento del consumidor, más que del relajamiento de las restricciones por el coronavirus”, afirmó el banco británico en una nota.

El miedo a que la pandemia podría tener un segundo brote paralizó el repunte de los precios por barril. Cerca de media decena de estados en EU vieron un alza en las nuevas infecciones.

El jueves, estados como Florida, California, Arizona y Texas reportaron un récord de hospitalizaciones en los últimos días, a medida que los estados reabren gradualmente su economía. En todo el país, el número de contagios superó los 2 millones.

Los precios reaccionaron en la semana a datos sobre inventarios petroleros y el acuerdo logrado el sábado por la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sus aliados, un grupo conocido como OPEP+, además de proyecciones pesimistas sobre la economía.

Datos de la Administración de Información de Energía (EIA) mostraron que los inventarios petroleros en EU subieron de forma inesperada en 5.7 millones de barriles en la semana al 5 de junio, a una cifra récord de 538.1 millones de barriles.

En tanto, el número de plataformas de perforación de petróleo crudo en EU, un indicador del suministro futuro, se redujo a 199 esta semana, mostraron datos de la firma de servicios petroleros Baker Hughes.

A la presión sobre los precios se sumaron los comentarios de la Reserva Federal, que indicó que el desempleo en Estados Unidos llegará a 9.3% a fines de 2020 y tardará años en volver a bajar, mientras se espera que las tasas de interés operen cerca de cero al menos durante el próximo año.

La OPEP+ acordó extender el pacto para remover casi 10% de los suministros globales del mercado por un tercer mes, hasta fines de julio, sin embargo, el ministro de Energía saudí, el príncipe Abdulaziz bin Salman, dijo el lunes que el reino y sus aliados Kuwait y Emiratos Árabes Unidos no continuarán con los recortes adicionales de 1.18 millones de bpd.

Este viernes, Reuters reportó que un panel denominado Comité Ministerial Conjunto de Monitoreo (JMMC, por sus siglas en inglés) aconsejará a la OPEP+ que coopere con una rebaja de suministro récord.

El JMMC está compuesto por los miembros de la OPEP Argelia, Kuwait, Venezuela, Nigeria, Irak, Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita, junto a Rusia y Kazajistán, ajenos al cartel.

Uno de los asuntos que mirará el JMMC es si los países que no han cumplido su cuota de recortes pueden hacer más. La OPEP+ exigió el sábado a países como Nigeria e Irak que compensen con reducciones extra de bombeo entre julio y septiembre.

Con información de Reuters