Los crecientes temores sobre la rápida propagación de la variante ómicron del COVID-19, así como una toma de utilidades de los inversionistas dieron pie a fuertes caídas de las acciones en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), durante noviembre.

De las 35 empresas que integran el Índice de Precios y Cotizaciones (IPC) y que son las más líquidas del mercado mexicano, 25 tuvieron correcciones a lo largo del mes pasado.

Las acciones más castigadas fueron Alsea con una disminución de 15.11% de su valor; Volaris con 14.39%; Elektra de 11.59%; Grupo Carso con 9.94%, y Femsa de 9.93%.

Aunque los mercados financieros se sacudieron en días recientes por las dudas que genera el impacto de la cepa ómicron en el proceso de recuperación de la economía global, las caídas también se debieron a que las compañías han alcanzado valuaciones altas.

Tiene que ver más con una corrección de mercado. Hay que entender que todo el IPC tuvo una disminución y estas emisoras particularmente son las que se han posicionado mejor en lo que va del año

comentó Carlos Hernández, analista senior de Masari Casa de Bolsa

De las cinco empresas con las bajas más pronunciadas en noviembre, cuatro acumulan rendimientos en el año, algo que se atribuye al crecimiento de sus ingresos, utilidades y flujo operativo, a medida que se reactivaron sus negocios. 

En contraste, de las 10 emisoras que presentaron números verdes, Gruma y Arca Continental estuvieron entre las grandes ganadoras del mes, con rendimientos de 7.51% y 4.17%, respectivamente.

Un factor jugó un papel primordial en las alzas: la disminución de los precios de materias primas como el maíz y el aluminio que utilizan en la producción de sus productos y que contribuye con mejores márgenes operativos en sus resultados, señaló Hernández.

Te puede interesar: Afores serán punta de lanza para empresas de la BMV

IPC aún se encamina hacia su mejor año desde 2012

El IPC sufrió en noviembre una caída de 3.14%, con lo que hiló tres meses con pérdidas por primera vez desde finales de 2018, y se ubicó en un nivel de 49,698.72 puntos. Pese a ello, se espera que cierre el año en 51,000 unidades, según estimaciones de Masari.

De confirmarse este pronóstico, el índice tendría su mejor año desde 2012, cuando registró un alza de 17.9%. Al cierre de la sesión de este martes, el IPC acumula una ganancia anual de 12.8%.

Hacia 2022, Grupo Financiero Ve por Más (Bx+) prevé que aún con las presiones inflacionarias a nivel global y las interrupciones en la cadena de suministro, las empresas mexicanas tendrán mejoras en sus estados financieros, aunque esto dependerá de que no se presenten confinamientos como los de 2020.

Vamos a tener un buen año en el mercado nacional. Para los primeros seis meses veremos el tema de la presión por la inflación y el impacto de las cadenas de suministro, pero esperamos que el IPC cierre en 57,900 puntos

dijo Juan Rich, director de análisis y estrategia de Bx+

Fed, la amenaza de volatilidad

La amenaza más reciente para los mercados financieros es la propagación de la variante omicrón del coronavirus que ha sido detectada en al menos 18 países; sin embargo, un retiro anticipado de los estímulos de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) supone el mayor punto de presión.

Sí estaríamos viendo continuidad en la volatilidad, más encaminado por un tema de la evolución de la inflación y sus implicaciones en la política monetaria. (No obstante) si bien pueden continuar ciertas correcciones, esto no debería representar un cambio de tendencia general en los precios de las acciones

mencionó Hernández

En su reciente comparecencia ante el Senado, el presidente de la Fed, Jerome Powell, adelantó que es posible que el banco central acelere la compra mensual de activos que de momento acabaría a mediados de 2022, situación que podría llevar a subir su tasa de interés antes de lo previsto.

Powell también advirtió que la nueva cepa de coronavirus, detectada por primera vez en Sudáfrica, plantea desafíos a la recuperación del empleo, de la economía y aumenta las presiones inflacionarias.