La Mezcla Mexicana de Exportación puso fin a su rally de cuatro semanas de alzas al caer 5.25% en la semana que concluyó el 4 de septiembre.
El crudo mexicano retrocedió 5.25% a 38.45 dólares por barril, su baja semanal más profunda desde mediados de junio de este año, cuando se desplomó 9.63%, de acuerdo con datos de Petróleos Mexicanos (Pemex).
Los temores sobre una lenta recuperación económica de la crisis del COVID-19 aumentaron las preocupaciones sobre una débil demanda de crudo.
Los precios se vieron presionados por las extendidas bajas en Wall Street y por un informe que mostró que el crecimiento del empleo en Estados Unidos se desaceleró aún más en agosto, momento en que se agotó la asistencia financiera del gobierno.
Las esperanzas de más estímulos se están perdiendo. Necesitamos que la actividad económica se recupere para que fluya la demanda
dijo John Kilduff, socio de Again Capital en Nueva York.
Un reporte del gobierno estadounidense mostró que la demanda doméstica de gasolina bajó en la última semana. Los inventarios de destilados de Asia en el centro de acopio de Singapur han subido por encima de máximos de nueve años, de acuerdo con datos oficiales.
La demanda mundial de petróleo podría caer entre 9 millones y 10 millones de barriles por día este año debido a la pandemia, pronosticó el ministro de Energía ruso, Alexander Novak.
Un recorte récord de suministro desde mayo por parte de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sus aliados, un grupo conocido como OPEP+, ha respaldado a los precios.
Pero, la OPEP comenzó en agosto a suavizar la escala de los recortes, aumentando la producción en casi un millón de barriles por día, según un sondeo de Reuters.
Con información de Reuters