Nota del editor: Este texto es meramente informativo y no representa una recomendación de inversión por parte de EL CEO
Durante las últimas dos décadas, los Fondos Cotizados en Bolsa (ETF, por sus siglas en inglés) han ganado popularidad entre los inversionistas mexicanos gracias al crecimiento del Sistema Internacional de Cotizaciones (SIC).
El SIC inició operaciones en 2003 para permitir a los inversionistas comprar valores listados en el extranjero, como acciones y ETF, con el requisito de tener una cuenta domiciliada en México.
México es el sexto país que más utiliza ETF en el mundo y esto es por la eficiencia del SIC, la cantidad de productos listados y la cercanía con Estados Unidos. El factor más importante es el concepto de diversificación internacional de los portafolios de los mexicanos. En el SIC tienes un menú gigante para invertir a través de ETF
dijo en entrevista Nicolás Gómez, director de iShares para América Latina en BlackRock.
A la fecha, el SIC, también conocido como ‘mercado global’, registra 3,188 valores en total, de los cuales 1,786 son acciones y 1,402 ETF, de acuerdo con datos de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).
Una de las ventajas de invertir en ETF listados en el SIC es que les aplica el mismo esquema fiscal que a las acciones, de 10% del Impuesto Sobre la Renta (ISR) directo, sin importar el monto de la ganancia anual del inversionista, subrayó Gómez.
En los últimos años, el SIC ha ganado relevancia en el mercado local. De hecho, en el primer trimestre de 2022 representó 53% del valor operado promedio diario de la BMV.
Así, el ‘mercado global’ aportó 11,417 millones de pesos del importe operado en el centro bursátil, mientras que el mercado local contribuyó con 9,955 millones, según su último reporte financiero.
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¿Por qué son atractivos?
Un ETF es un conjunto de activos que cotizan en la bolsa de valores que facilitan invertir de manera diversificada y con bajo costo.
Su objetivo es replicar el comportamiento de un índice bursátil (como el IPC, Dow Jones o el S&P 500, entre otros), materias primas (como el oro o el petróleo), tipo de cambio (peso, dólar o euro), activos subyacentes (títulos de deuda, sectores, países, entre otros) y logaritmos matemáticos.
Con un capital menor puedes lograr una cartera bien diversificada con estos instrumentos. Por ejemplo, si quisieras hacer una estrategia indizada al S&P 500 se puede hacer con un solo ETF en lugar de tener que comprar las 500 acciones del índice
explicó Eugenio Gallegos, analista bursátil independiente.
Los ETF compiten con lo que en México se conoce como fondos de inversión, pero ofrecen varias ventajas en comparación con estos vehículos, entre ellas la disponibilidad inmediata del dinero, la elección de la composición del portafolio y la opción de invertir el monto que se desee.
“A través de los ETF puedes lograr tener la misma complejidad que ofrece un fondo de inversión pero con todas las ventajas mencionadas”, de acuerdo con el estratega.
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Activos bajo gestión superan los 10 billones de dólares
A nivel global, el valor de los activos de los ETF alcanzó los 10 billones de dólares en 2021, según cifras de Statista.
La cantidad de ETF también creció, al pasar de 276 que había en 2003, hasta 8,552 el año pasado. Esto significa que en el SIC están disponibles 16% del total de ETF que existen.
Gómez dijo que la industria de gestión de activos crece alrededor de 4% anual, aunque el crecimiento de la industria de ETF es más acelerada, de alrededor de 22% año tras año.
Sin embargo, de todos los ETF disponibles en todo el mundo, la mayoría de los activos bajo gestión pertenecen a un número relativamente pequeño de fondos.
De hecho, entre los 100 ETF más grandes, los 20 principales poseen más del 50 % de los activos, es decir más de 5 billones de dólares, de acuerdo con un estudio elaborado por iShares de BlackRock.
BlackRock, el más solicitado por inversionistas institucionales
Si bien los ETF se consideran principalmente como un vehículo de bajo costo para inversionistas individuales, también son populares entre los inversionistas institucionales, que tienen casi el 25% de sus carteras en estos instrumentos.
Entre los proveedores de ETF más solicitados por inversionistas institucionales, los encuestados dijeron que prefieren a BlackRock, considerado el fondo más grande por gestión de activos, superando a otras firmas como State Street, Invesco y Vanguard.
El ejercicio también reveló que los criterios más importantes que los inversionistas institucionales consideran al seleccionar un ETF son: la liquidez y volumen de negociación, el índice que replica, la posición de mercado del proveedor y el desempeño histórico.
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