Nota del editor: Este texto se publicó por primera vez a las 9:58 a.m. (hora de Ciudad de México) y se actualiza con el cierre de la bolsa de Estambul
Los mercados turcos se tiñen de rojo este lunes después de que el presidente, Tayyip Erdogan, destituyó el fin de semana al gobernador del banco central, Naci Agba, partidario de una política monetaria más restrictiva, lo que provocó temor a que se reviertan recientes alzas de las tasas de interés.
La lira turca cayó hasta 15%, con lo que volvió a los niveles alcanzados a principios de noviembre de 2020, cuando tocó un mínimo histórico intradía.
La divisa recortó las pérdidas luego de que el ministro de Finanzas turco, Lutfi Elvan, dijo que Turquía se ceñirá a las reglas del mercado libre. A las 10:55 a.m. (hora de Ciudad de México), la lira se deprecia 7.81%, a 7.77 unidades por dólar, según datos de Investing.com.
El BIST 100, la bolsa de Estambul cerró con una caída de 9.79%, a 1,379.25 puntos, la más profunda desde junio de 2013 y su nivel más bajo en más de tres meses.
Así se desempeñan los mercados financieros en la jornada
Goldman Sachs y otras entidades esperaban una fuerte caída de la lira y de las acciones turcas, dadas las opiniones poco ortodoxas del nuevo gobernador del banco central, así como por lo que se considera como el último golpe a la credibilidad de la entidad tras años de injerencias políticas que han perseguido a la principal economía de los mercados emergentes.
Agbal fue destituido a última hora del viernes en un decreto presidencial que no dio ninguna razón oficial, pero que se produjo dos días después de que el banco central subió bruscamente su principal tipo de interés oficial en 200 puntos base, una medida bien recibida por los mercados como una forma de luchar contra la inflación.
El nombramiento de Sahap Kavcioglu, un exbanquero y legislador del partido gobernante, en las primeras horas del sábado, supone la tercera vez desde mediados de 2019 que Erdogan ha despedido abruptamente a un gobernador del banco central.
Kavcioglu trató de apaciguar los temores a un viraje desde una política monetaria restrictiva a otra más laxa, diciendo a los directivos de los bancos el domingo que no planeaba ningún cambio inmediato.
Nurettin Canikli, jefe adjunto del gobernante Partido AK de Erdogan, dijo que “el cambio por parte del gobierno de un gobernador del Banco Central, que consideraba que no utilizaba los instrumentos de política monetaria de forma racional, y que por tanto suponía una gran carga financiera para la economía, no es un reto a los mercados”.
La destitución de Agbal, quien estuvo solo cinco meses en el cargo, reafirma el control político que durante años ha perjudicado la visión de los inversores extranjeros sobre la importante economía emergente.
Analistas señalan que es probable que Kavcioglu dé marcha atrás en las subidas de tasas de interés que Agbal había aplicado para apuntalar la cuenta de capital de Turquía y sus menguantes reservas de divisas.
El analista de Societe Generale, Phoenix Kalen, dijo que la medida dejaba a Turquía “más allá del punto de no retorno” y predijo “turbulencias financieras”.
En la conferencia telefónica con los banqueros turcos, Kavcioglu dijo que la política actual continuaría y que cualquier cambio dependería de que se frene la inflación, que según él era el objetivo principal, dijo la fuente familiarizada con la conferencia.
El banco central no comentó inmediatamente sobre la conferencia. El domingo, Kavcioglu dijo que el banco se centraría en frenar permanentemente la inflación, que se ha mantenido en dos dígitos durante la mayor parte de los últimos cuatro años.
Acciones de bancos expuestas
El banco español BBVA reafirmó este lunes que su compromiso con Turquía no ha cambiado y sus acciones cayeron, junto con las de otros bancos europeos con exposición en el país.
Las acciones de BBVA, que obtiene alrededor del 14% de sus beneficios en Turquía a través de su unidad turca Garanti, en la que posee 49.9% de participación, retrocedieron 7.72%, a 4.317 euros, su caída más profunda desde julio del año pasado y su precio más bajo en un mes.
Lo anterior supone una pérdida de alrededor de 2,000 millones de euros de su valor de mercado.
“El compromiso de BBVA con Turquía no ha cambiado”, dijo un portavoz de BBVA a Reuters, añadiendo que el impacto de una caída del 10% de la lira frente al euro sólo representaba una repercusión de 2 puntos básicos en su capital.
BBVA ya ha adoptado una política activa de cobertura en los mercados de divisas para proteger sus ganancias y su capital frente a cualquier posible contratiempo que pueda originarse en Turquía.
Las acciones de otros bancos de la zona euro expuestos al país como el italiano UniCredit, el francés BNP Paribas y el holandés ING también registraron caídas.
Con información de Reuters