El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, podría dar más tiempo a Beijing para negociar un acuerdo que finalice el conflicto comercial entre las dos potencias.
De acuerdo con Liu He, principal asesor del presidente detrás del presidente Xi Jinping, el gobierno chino ha propuesto a la Casa Blanca que Trump se reúna con su homólogo en la isla turística china de Hainan, a finales de febrero.
La mañana de este jueves, el mandatario estadounidense comunicó en un tuit que estaba abierto a una nueva reunión con Xi:
“No se logrará un acuerdo final hasta que mi amigo el presidente Xi y yo nos reunamos en un futuro próximo para discutir y acordar algunos de los puntos más antiguos y más difíciles”, escribió Trump, y más adelante comentó a periodistas que podría estar dispuesto a aceptar un acuerdo limitado antes de la fecha límite (1 de marzo).
“Esto no va a ser un pequeño acuerdo con China”, declaró Trump. “Esto va a ser un gran problema o va a ser un acuerdo que pospondremos por un tiempo”.
Los dos presidentes acordaron una tregua comercial de 90 días cuando se reunieron en Buenos Aires el 1 de diciembre, para dar tiempo a los negociadores y llegar a un acuerdo. En su defecto, el gobierno de Trump aumentaría los aranceles a 25% desde el 10% de los 200 mil millones de dólares en productos chinos.
De acuerdo con el diario estadounidense Wall Street Journal (WSJ), la invitación se produjo cuando Liu entregó un paquete de concesiones modestas para las conversaciones comerciales que comenzaron el miércoles en el edificio de la Oficina Ejecutiva de Eisenhower cerca de la Casa Blanca.
No se llegan al precio
De acuerdo con el WSJ, la oferta no llega a lo que Washington ha pedido, lo que incluye cambios más profundos en políticas industriales proteccionistas de Beijing que obstaculizan a los competidores estadounidenses y la eliminación de la presión sobre las compañías estadounidenses para transferir tecnología a sus socios chinos.
“La mejor esperanza para conseguir un acuerdo es una reunión cara a cara” entre los dos líderes, dijo David Dollar, académico de Brookings Institution China. “La economía de los Estados Unidos se está desacelerando y la presión sobre Trump es hacer un trato”.
Al mismo tiempo, es poco probable que Beijing también acepte las demandas de los Estados Unidos para rehacer su política industrial y reducir el papel del estado en la economía, aseveró al WSJ el experto de la Universidad de Cornell en China, Eswar Prasad.