El presidente Donald Trump aseguró que merece ser galardonado con el Premio Nobel de la Paz por su trabajo en Corea del Norte y Siria, pero se quejó de que probablemente nunca obtendría el reconocimiento que recibió su predecesor, Barack Obama.
Trump terminó una conferencia de prensa en el Jardín de las Rosas de la Casa Blanca quejándose de que el expresidente demócrata, su némesis, ganó el Premio Nobel en 2009, apenas meses después de iniciado su primer mandato.
“Se lo dieron a Obama. Ni siquiera sabía por qué lo había recibido. Estuvo allí durante unos 15 segundos y recibió el Premio Nobel. Él dijo: ‘Oh, ¿por qué lo obtuve?'”, se quejó Trump. “En mi caso, probablemente nunca lo recibiré”, agregó.
Trump afirmó que salvó a 3 millones de personas que viven en la región siria de Idlib, controlada por rebeldes, de ser asesinadas luego de que advirtió a Rusia, Irán y al Gobierno sirio que no iniciaran una ofensiva que habían planeado. “Nadie habla de eso”, reclamó.
Los ataques a la región de Idlib han continuado, aunque Trump dijo que se realizan de manera “quirúrgica”.
El mandatario estadounidense reveló que el primer ministro japonés, Shinzo Abe, le entregó “la copia más hermosa” de una carta de cinco páginas en que lo nomina al Premio Nobel de la Paz por iniciar negociaciones y aliviar las tensiones con Corea del Norte.
“¿Saben por qué? Porque tenía cohetes y misiles volando sobre Japón (…) Ahora, de repente, se sienten bien. Se sienten seguros. Yo hice eso”, sostuvo Trump y añadió que la administración de Obama “no podría haberlo hecho”.
La Casa Blanca declinó hacer comentarios sobre la afirmación de Trump de que Abe lo había nominado, y un portavoz de la embajada japonesa dijo que no tenía información sobre tal carta.